'Isabel', Premio Nacional de Televisión: 11 razones para ganar
La serie Isabel, producida por Diagonal TV y emitida los lunes por La 1 de TVE (22.30 horas), acaba de ser reconocida con el Premio Nacional de Televisión 2014, que concede cada año el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Sucede en este puesto a la fallecida periodista Concha Garcia Campoy (2013) y se convierte así en la segunda ficción —Cuéntame cómo pasó fue galardonada en 2009— que se alza con este reconocimiento dotado de un premio en metálico de 30.000 euros.
El jurado presidido por Teresa Lizaranzu, directora general de Política e Industrias Culturales y del Libro, ha basado su su decisión en "el tratamiento conjunto del rigor histórico, la divulgación para todos los públicos y su contribución a la difusión de valores". Además ha mostrado su admiración por "la forma en que se refleja una personalidad tan relevante de nuestra historia" como la de la reina Isabel la Católica.
Éstos son sin duda algunos de los valores de la serie, pero Isabel esconde otros méritos que le hacen merecedora de este premio.
1.Te hace recuperar el interés por la historia de España
Y volver a los libros para repasar los temas que teníamos olvidados. Además, en estos momentos en los que se discute la integridad de España, a causa de la consulta catalana, Isabel dibuja muy bien el origen del Reino de España a partir del enlace de Isabel y Fernando. La serie plasma bien lo que reflejan los libros y, salvo contadas excepciones, se ciñe a los hechos. Una de estas excepciones o errores se produjo en el segundo capítulo de esta tercera temporada : las naves de Cristobal Colón salían del puerto de Cádiz hacia el nuevo mundo (1492) y en el fondo se podía ver la Catedral de la ciudad andaluza (empezó a construirse en 1772 y se terminó en 1838).
"La primera temporada la despedimos en un cine de Madrid. Ahí se me acercó un profesor para contarme que con Isabel había recuperado a alumnos que creía perdidos y que ahora se han empezado a interesar por la historia", explicó el actor Ginés García Millán, que interpreta aJuan Pacheco, en un reportaje de El País Semanal.
2. Cuenta con el apoyo del público y de la crítica
Desde que empezó, la serie ha contado con el respaldo de los telespectadores cosechando datos de audiencia que supera el 15% de share. La primera temporada (del 10 de septiembre de 2012 al 3 de diciembre de 2012) tuvo una media de cuatro millones de seguidores y la segunda (del 9 de septiembre de 2013 al 2 de diciembre de 2013) superó los 3,3 millones. El último capítulo emitido, el quinto de la tercera y última temporada, obtuvo un 15,8% de share y casi tres millones de telespectadores.
Y mientras esto ocurre, se han sucedido los premios y reconocimientos de la crítica. En 2012 obtuvo el Premio Ondas a la mejor serie de ficción nacional; en 2013, la Antena de Oro y ha ganado también el premio Iris (2012) y otros de carácter internacional como el Premio ACE de la Asociación de Cronistas de Espectáculos de Nueva York en 2013, el premio a la mejor serie internacional 2012 en el Festival de Hamburgo y también en el Festival Internacional de Televisión y Cine de Nueva York en 2013.
3. Ha acertado con el reparto, tanto con los actores principales como con los secundarios
Michelle Jenner y Rodolfo Sancho, los dos protagonistas principales de la ficción, han sido galardonados en múltiples ocasiones por sus interpretaciones. La actriz de 28 años, que da vida a Isabel la Católica, tiene en su haber el premio Ondas a la mejor intérprete de ficción femenina de 2013, el Fotogramas de plata de 2013 y el Premio ACE 2013, este último de carácter internacional.
Mientras tanto, Rodolfo Sancho, en el papel de Fernando El Católico, ha obtenido el premio Iris 2012 y el premio CineyMás de Televisión 2012/2013.
Los secundarios tampoco se quedan atrás. Pedro Casablanc (el Arzobispo de Toledo Alfonso Carrillo) recibió el premio de la Unión de Actores en 2012 y Pablo Derqui (Enrique IV de Castilla) ha obtenido el Premio ACE de Nueva York.
4. Hace confiar en que la tele pública puede apostar todavía por productos de calidad
En este momento en que televisión pública española registra datos de share por debajo del 10% y se posiciona por debajo de Telecinco y Antena 3 en la lista de las cadenas más vistas... En este momento en que sus informativos son ampliamente cuestionados y se retiran programas como ocurrió con Entre todos de Toñi Monero. En este momento en que el presidente de la entidad, Leopoldo González-Echenique, se ha visto obligado a dimitir... Series como Isabel (o Águila Roja o Cuéntame cómo pasó) nos hacen tener fe en el ente público y pensar que todavía puede emitir programas de calidad, bien ambientados, con un buen guión y con un reparto potente.
5. La caracterización de los personajes
El vestuario, creado para la serie, protagonizó en 2013 una exposición en el Museo del Traje de Madrid. Isabel. Vestuario de la serie de televisión fue la primera muestra de este tipo acogida por la galería madrileña. En ella se mostraron 33 pesados y recargados trajes medievales, elaborados con brocados, sedas y terciopelos. El objetivo era descubrir al público el trabajo artesanal que se esconde tras cada traje y en el que colaboran desde sombrereros hasta guarnicioneros (encargados de trabajar el cuero) y modistas. Entre los trajes expuestos estuvo el vestido de seda blanco que lució la reina Isabel en su coronación, el favorito de Jenner, y el de terciopelo que apareció en la rendición de Granada.
Son pocos los errores que se detectan en estas prendas. El decano de la Facultad de Documentación de la Complutense José María de Francisco Olmos reconoció en El País Semanal que había fallos pero de esos "que nos damos cuenta cuatro". Lo que menos le convence es el vestido de cuero negro de Juan Pacheco y el hecho de que la reina Isabel de Castilla vista repetidas veces de blanco.
6. Y también el saber envejecer
Aunque hay quienes critican la caracterización de Michelle Jenner, a la que no ven suficientemente envejecida, lo cierto es que la actriz de 28 años ha ido cambiando a lo largo de las tres temporadas de la serie. Ya en la segunda temporada se trató de darle un aspecto más envejecido y con más peso. "Me van engordando progresivamente, no sé exactamente cuántos kilos son, pero me van poniendo debajo de la ropa como almohadillas de espuma y también me ponen el rostrillo (adorno consistente en un volante de tela rizada que se ponían las mujeres alrededor de la cara), que es como se la ha visto siempre a ella en los cuadros. Por eso es un cambio realmente notable no sólo a nivel emocional, sino también físico", explicaba la actriz en una entrevista.
Para la última temporada, Jenner ha continuado con el envejecimiento sometiéndose a largas sesiones de maquillaje para conseguir darle un aspecto más envejecido.
7. Está ambientada en los lugares donde ocurrieron los hechos históricos
El caso más llamativo es la Alhambra de Granada, que abrió sus puertas para que en los exteriores se grabasen escenas de la segunda temporada. En concreto se rodó en el Patio de los Leones, y la última escena de esa temporada en el Partal. Además, Granada también fue escenario de las escenas sobre la expulsión de los judíos en la Carrera de Darro y el funeral de Muley Hacén en Sierra Nevada.
Fuera de la ciudad andaluza también ha grabado en Cádiz, con la salida de las naves de Cristobal Colón hacia el Nuevo Mundo (y con fallo histórico incluido), en Oropesa (Toledo), El Escorial (Madrid), Cáceres y Toledo. En esta última se utilizó la Catedral como escenario de la proclamación de Juana de Castilla y Felipe como herederos.
El único espacio donde no pudieron grabar fue en Barcelona, cuyo ayuntamiento se negó a que la serie rodase en el Museu d'Història por "por motivos de desencuentro entre la esencia de rigor histórico del museo y la difusa línea entre realidad y ficción de la serie". Esas escenas se rodaron finalmente en Plasencia, capital de la comarca del Jerte, en el norte de Extremadura, donde se registró cómo Fernando el Católico sufría un atentado al salir de palacio.
8. Ha despertado el interés internacional
La serie cosecha éxito en distintos países del mundo. Y no sólo queda reflejado en los premios obtenidos, también en el hecho de que 22 países han comprado los derechos de emisión. Desde 2013 se puede ver a través del canal 22 de México y también desde Sky Arts en Reino Unido. Otros lugares como Rusia, Serbia, Croacia o Chile también han mostrado su interés por la producción de Diagonal TV.
9. Tiene un final y no se va a prolongar irremediablemente
Por mucho que la audiencia se empeñe o la productora quiera estirar la gallina de los huevos de oro, Isabel no va a ser eterna como sí lo está siendo Cuéntame cómo pasó (ha emitido ya 15 temporadas). El guión de Isabel está en los libros y esta tercera temporada será la última. Como anunció el propio Rodolfo Sancho en una entrevista en el diario ABC, el final llegará con la muerte de Isabel el 26 de noviembre de 1504 en el Palacio Real Testamentario de Medina del Campo (Valladolid).
La única opción que se baraja para continuar con el éxito es hacerlo con una secuela, ya sin Michelle Jenner y probablemente con nuevos escenarios. Los rumores hablan de que podría centrarse en su hija Juana (Irene Escolar) o saltarse una generación y ambientarla en el reinado de Carlos I.
10. España también es capaz de producir series parecidas a las que se hacen en el extranjero con intrigas palaciegas
Porque Isabel está más próxima a Los Tudor, la serie protagonizada por el actor Jonathan Rhys-Meyers sobre el reinado de Enrique VIII, o incluso Juego de Tronos (ésta última con más distancia) que a las típicas comedias familiares ambientadas en bares o colegios y que tienen una familia de clase media como protagonista.
11. No oculta las relaciones íntimas de la época. Ni entre Isabel y Fernando, ni tampoco las mantenidas por miembros de la iglesia
Las intrigas palaciegas aderezan la serie, la hacen más atractiva y dan a esos personajes una vitalidad y un realismo que no encontramos en los libros de Historia ni en las novelas. En un época muy influída por la religión, los placeres mundanos también tenían cabida.