El primer desfile del 12 de octubre de Felipe VI recuperará la exhibición aérea
El primer desfile militar de la Fiesta Nacional del 12 de octubre que presidirá Felipe VI como rey volverá a incluir una exhibición aérea, que en esta ocasión contará con la participación de más de 30 aeronaves tanto españolas como extranjeras, según han informado a Europa Press fuentes militares.
Tras dos años en los que el único ejercicio aéreo que se podía ver durante el desfile del 12 de octubre corría a cargo de la Patrulla Águila para dibujar la bandera de España, el Ministerio de Defensa ha decidido hacer un mayor desembolso este año a la hora de financiar la parada militar.
Coincidiendo con la conmemoración en 2014 del 75 aniversario de la creación del Ejército del Aire, el público asistente en el 12 de octubre podrá disfrutar de, además de la Patrulla Águila, una exhibición con más de 30 aeronaves, entre las que habrá aparatos de patrullas acrobáticas de otros países que un día antes también van a participar en un Festival Aéreo en la base de Torrejón (Madrid), han indicado las fuentes consultadas.
Las aeronaves que se podrán ver durante el desfile militar llevan días practicando en el cielo de Madrid, mientras que los efectivos que marcharán a pie por el Paseo del Prado de la capital también se encuentran ensayando desde hace semanas en sus acuartelamientos.
CON AVIONES, PERO SIN CARROS
El Ministerio de Defensa todavía no ha dado a conocer el presupuesto que va a dedicar al desfile del 12 de octubre, si bien es previsible que sea algo superior al año pasado -que costó alrededor de 823.000 euros- debido a la participación de más aeronaves. Eso sí, las fuentes consultadas han señalado que lo que este año tampoco se podrá ver por las calles de Madrid serán carros de combate.
El de este año será el primer desfile militar con motivo de la Fiesta Nacional de Felipe VI desde que es rey de España, si bien no será el primero que presida, ya que el año pasado, como Príncipe de Asturias, sustituyó a su padre al encontrarse éste convaleciente de una operación de cadera a la que se había sometido días antes.
Tras las críticas de años anteriores, Letizia apostó en 2011 por una opción segura: traje en tonos rosas combinado con un top de seda.
Es 2010: Letizia viste un pantalón de lana y pata de elefante y se cubre con un chal. Los expertos debaten si cumple o no el protocolo.
2007: aunque el peinado y el color del abrigo le favorecen, la incomprensible elección de medias y complementos estropea el conjunto.
