El obispo de Alcalá compara el 'Tren de la Libertad' con los trenes de Auschwitz
El obispo de Alcalá de Henar,es Juan Antonio Reig Plà, ha comparado el Tren de la Libertad, que en febrero se manifestó por las calles de Madrid contra la reforma de la ley del aborto impulsada por Gallardón, con los trenes de Auschwitz, el campo de concentración que los nazis instalaron en Polonia.
"Debería llamarse, no el Tren de la Libertad, sino el tren de la muerte, del holocausto más infame", ha dicho Reig Plà, en un comunicado publicado este jueves, en el que critica al Gobierno por retirar la reforma de Gallardón y al líder de la oposición, Pedro Sánchez, por pedir la retirada del Toro de la Vega y no oponerse al aborto.
"Conviene denunciar, con todo respeto a su persona, que el presidente del Gobierno ha actuado con deslealtad respecto a su electorado al no cumplir su palabra en esta materia, explicitada en su programa electoral; también ha actuado con insensatez pues ha afirmado que lo sensato es mantener el derecho al aborto, es decir, el derecho a matar a un inocente no-nacido, el crimen más execrable", indica el obispo de Alcalá.
Además, considera que "los partidos políticos mayoritarios se han constituido en verdaderas estructuras de pecado", aunque dirige sus dardos directamente hacia el PP. "Ha llegado el momento de decir, con voz sosegada pero clara, que el Partido Popular es liberal, informado ideológicamente por el feminismo radical y la ideología de género, e infectado como el resto de los partidos políticos y sindicatos mayoritarios, por el lobby LGBTQ", escribe Reig Plà.
El prelado prosigue su ataque al partido de Rajoy asegurando que "no es justificable moralmente la postura de los católicos que han colaborado con el PP en la promoción de la reforma de la ley del aborto a la que ahora se renuncia".
También carga contra Pedro Sánchez, secretario general del PSOE, a quien se refiere como un hombre "falto de rigor intelectual y con un déficit de sensibilidad ante la dignidad de la vida humana" y al que critica por llamar a Sálvame para decir que se opone al Toro de la Vega y por olvidar "la violencia criminal contra dos millones de niños abortados: decapitados, troceados, envenenados, quemados".