Trucos para viajar y comprar tus billetes más baratos
Comprar el billete de avión unos meses antes o esperar al último momento, viajar a determinado destino en una u otra fecha para que salga más barato o aprovechar los descuentos puntuales para lograr chollos. ¿Haces algo de esto? Cuidado, porque quizás no estés yendo por el mejor camino para conseguir tu objetivo: conseguir viajar a buen precio a los mejores destinos.
¿CUÁNDO COMPRO?
Si miras por internet puedes volverte loco intentando encontrar el momento justo en el que comprar tu billete de avión. Las webs de último minuto aseguran tener los mejores precios con los billetes que no se han vendido, pero si eres un poco previsor, mejor que no lo dejes para el último momento. Te explicamos. Las compañías aéreas, sobre todo las low cost, van regulando sus precios en base a un algoritmo en el que se tiene en cuenta la gente que busca ese vuelo, la gente que lo compra y los asientos que quedan libres. Si se venden pocos asientos y hay poca gente interesada en ese viaje, seguramente el precio del vuelo se mantenga casi hasta el último minuto. Pero si la situación es justo la contraria pagarás hasta 10 veces más por el mismo asiento que hace unas semanas.
¿El consejo? Es recomendable reservar con unos dos meses de antelación si vas a volar en una aerolínea de bajo coste. En el caso de hacer un vuelo largo con una compañía tradicional, mejor anticípate un poco más, en torno a las 5 semanas previas a tu viaje. Te parecerá muy precipitado, pero ya sabes que más vale prevenir. En la mayoría de ocasiones esperar demasiado a que el vuelo baje de precio sólo implica que suba cada vez más.
¿Y CUÁNDO VIAJO?
No te sorprenderá si te decimos que agosto es el peor mes para irte de vacaciones. Sí, son los 30 días que casi todo español tiene libres, pero si puedes evitarlos, mejor que mejor. Además de huir de las grandes aglomeraciones de turistas repartidos por cada esquina de planeta, conseguirás mejores precios y más ofertas. De hecho, ¿sabes cuál es el mejor mes para veranear? Enero.
Suena raro, pero después de las fiestas navideñas los precios de los viajes caen al mismo ritmo al que se expanden los descuentos de las rebajas. Vale, sí, quizás no se pueda llamar veranear, pero unas vacaciones sientan bien cuando sea.
Evidentemente, en este periodo no podrás irte al Mediterráneo a tomar el sol, pero quizás sí que puedas hacer ese viaje tan esperado que durante el verano no pudiste por su alto precio. En esta época viajar al Caribe, a Latinoamérica o a África es una opción rentable y muy satisfactoria. Mientras tus compañeros de trabajo pasan frío en pleno enero, tú disfrutas de las playas de lugares como la Riviera Maya por 400 euros menos de lo que te costaría ir en agosto.
Destinos y fechas hay muchas, pero lo mejor es revisar antes bien a dónde te diriges para buscar los mejores precios y la mejor época para volar. Si tienes eso controlado, ya sólo te queda disfrutar al perfecto estilo low cost.