Cinco inventos curiosos que puedes encontrar en la playa este verano (FOTOS, VÍDEOS)
Sombrilla, toalla y chanclas. Gafas de sol, palas y crema protectora. Y a la playa. Décadas después del asalto a las playas en los años sesenta, el españolito medio no ha cambiado mucho su forma de veranear ni el equipo que monta para ello. De vez en cuando incorporamos una neverita, o un sombrero, los más arriesgados. Y para de contar.
Pero hay algunos locos inventores que han decidido darle una vuelta a la visión clásica del kit de playa: ¿por qué tenemos que llevar siempre toallas incómodas o que pesen mucho? ¿Es que siempre hay que jugar a las palas, y encima con un ojo en la sombrilla por si algún amigo de lo ajeno se quiere llevar nuestro smartphone? Medio de siglo después de tomar las playas del mundo, es hora de cambiar.
Hemos hablado con cinco empresas cuyos creadores decidieron que había productos más allá de lo habitual, que podían gustar, ponerse de moda siendo de calidad y, quién sabe, quizá convertirse en clásicos.
Una toalla con clavos
En la playa es imposible sujetar la toalla bien. Si no se vuela, se mueve en cuanto te sientas o te tumbas en ella, y entonces ya la tienes llena de arena y de piedras.
De ahí que en 2012 el español Mario Menéndez y el francés Phillipe Duprez decidieran crear una toalla de playa que, además de ser extragrande y de algodón, tuviera clavos para poder fijarla a la arena y que no se moviera. "Yo soy de Gijón", nos cuenta Mario por teléfono, "y toda mi vida he detestado las toallas. Lo peor es que se quedan mojadas cuatro horas". Además, las toallas pesan, la arena se queda incrustada, ocupan mucho en la mochila (si es que caben), se mueven en la playa... Así nació Ôbaba, que intenta dar solución a todos esos problemas: se seca rápido, no pesa, es lo suficientemente fuerte para mantenerse quieta (gracias también a esos clavos) pero ligera como para llevarla a todos lados. Desplegado, su modelo más pequeño es tan grande como una cama de matrimonio. El grande es mayor aún: "Te miran de reojo", dice Mario.
Las llamadas piquetas son de plástico y ayudan a que la toalla se clave fácilmente. Lo tienen todo pensado: están realizadas en fibra y en principio pueden ser transportadas como equipaje de mano en cualquier compañía aérea. Y se pueden reponer si se pierden.
La firma llegó a España en 2013 y ya se ha instalado en 95 tiendas de siete países. Van creando diferentes modelos y colores cada temporada y han lanzado varias colecciones limitadas con diseñadores. Quizá su mayor dificultad estribe en el precio: los modelos van desde los 45 hasta los 75 euros: "Sabemos que no es barato para una toalla de playa, pero es una decisión meditada. Este algodón se fabrica específicamente para nosotros: es el más fino que podemos hacer para que no pase arena. Todo está hecho en Francia, en Europa, y tiene certificado ecológico".
Espadas sin lucha
Las palas pueden ser el juego del verano, de todos los veranos. Pero hay algunos inventos que salen al mercado cada año y nos alegran las vacaciones. ¿Quién no recuerda aquella especie de palas fosforitas con velcro de los noventa? Esta temporada puede que, en vez de palas, en la playa te encuentres con unas espadas. De plástico, eso sí.
Las llamadas Ring Stix son dos espadas de dos colores distintos con un aro que se lanza entre los dos jugadores. No parece muy difícil, pero tampoco es fácil. "Hasta que no llevas un cuarto de hora ensayando no triunfas", explican sus distribuidores. En Estados Unidos existen desde 2011, pero este año las ha traído a España la marca Fábrica de Juguetes. Así, el producto no se importa, sino que se fabrica directamente en Ibi (Alicante), lo que ayuda no solo a que se aumente la producción de juguetes en España sino a que la distribución sea más fácil y más barata.
En Estados Unidos, el set de espadas se ha alzado con premios y sellos otorgados por distintas asociaciones que lo acreditan como juguete del año. "En España estamos empezando, es una apuesta de consolidación. Se están cumpliendo nuestras expectativas, por lo que si gusta puede funcionar", explican desde Fábrica de Juguetes. Y quizá el año que viene también se fabriquen en Ibi los modelos que brillan en la oscuridad o las bolsas de transporte que ya pueden verse en Estados Unidos.
En España se puede encontrar en Internet, grandes superficies y jugueterías por entre 12 y 14 euros.
Una toalla-tumbona
A la playa parece que hay que llevarse mil cosas. Que si sombrilla, que si toalla, que si la crema, la tumbona... Por lo menos, que en algo nos ayuden con un dos en uno, ¿no?
Los portugueses Francisca Falcao y Pedro Ravara crearon una toalla (¿quién si no dos portugueses iban inventar algo basado en una toalla?) con respaldo que han venido a llamar Origama Sun Seat. En realidad, esta toalla tiene un par de estacas que se clavan en la arena (que no en la espalda, nos prometen desde su empresa de distribución en España) fuertemente y en vertical y que sirven como respaldo, ya que se introducen por unos huecos que tiene la toalla para que, precisamente, no molesten.
"Tiene dos posiciones y tres orientaciones", nos cuenta Ignacio Vidal, distribuidor de Origama en España, que ha tenido que hacer un vídeo con instrucciones para que se entienda fácilmente cómo clavarla. Al recogerla, también resulta fácil de llevar, ya que las estacas se guardan dentro de la toalla, que se enrolla y se cuelga al hombro como una esterilla. En Portugal los consumidores la han declarado Producto del Año 2014, y en España ha aterrizado este verano.
HOW TO USE ORIGAMA CHAISE LONGUE from Origama on Vimeo.
En Portugal el producto llegó en 2012, pero el verano de 2013 tuvo lugar su auténtico boom. En España este año está en casi veinte tiendas físicas, además de en Internet. "El que viene va a ser nuestro año", confía Vidal. En España se han vendido unas 6.000, y cuesta unos 45 euros.
Unas gafas diferentes
En gafas de sol, lo primero que hay que buscar es la calidad: que el cristal esté homologado y tape correctamente el sol. Luego, claro, viene el diseño. Que sienten bien, que queden bonitas, que estén de moda... Este verano, playas y piscinas están llenas de las llamadas gafas con cristales de espejo, especialmente de moda: hasta los reyes Felipe y Letizia las han llevado en sus vacaciones.
Pero para gafas originales y que se verán mucho menos, las forradas en fieltro. Parece contradictorio: unas gafas de sol, que se usan especialmente para los días de sol, cuando hace calor, con un material como el fieltro. Las ha lanzado al mercado la firma Italia Independent. Los representantes de la marca en España cuentan que "llevan detrás un gran trabajo de innovación, de investigación".
Aunque muchos puedan temer que las gafas se estropeen al mojarse o al tocar la arena, ahí está la gracia. El diseño tiene un cuidado extremo de los materiales, por lo que este no se estropean tan fácilmente. "Los modelos no pesan, se lavan bien, muchos se doblan". Él éxito de Italia Independent, comandada por Lapo Elkann, está siendo fulminante: sus diseños los llevan desde it girls como Olivia Palermo o Chiara Ferragni a Pol Espargaró (con el que han creado una edición especial) o Lady Gaga.
El precio oscila entre los 127 y los 167 euros, según el modelo.
Un guarda-todo para bañarse sin miedo
Ya te hemos hablado de él, pero no podemos dejar pasar la oportunidad para volver a citar este chisme que es, cuanto menos, original. La llamada Securbeach es una mini-caja fuerte que te puedes llevar a la playa para guardar tus cosas con tranquilidad. Ha sido creada por el dueño de viveros de plantas Pedro Benavent tras presenciar un robo en una playa de Barcelona.
La gracia del invento es que tiene un sistema de anclaje que permite colocarlo en la arena de la playa y que sea realmente complicado de sacar: habría que hacer 90 kilos de fuerza para poder llevárselo.
Pesa apenas 750 gramos, se puede comprar en algunas tiendas de Barcelona, Gerona, Málaga y Alicante y en su página web por 65 euros.