Sexo en el agua: cinco riesgos y problemas por los que NO hacerlo
Calores, sudores, cervezas, alcohol, verano, playas... No eres el primero al que se le ha venido la idea a la cabeza. ¿Qué pasa si hacemos el amor en el agua? ¿Hay algún problema con mantener sexo acuático?
Pues sí, hay más de un riesgo. Nuestros compañeros de LeHuffPost en Francia han hecho un interesante repaso a lo que puede pasar si tenemos relaciones sexuales en el agua.
- Te arriesgas a coger un montón de bacterias
En el agua del mar, de la piscina, de un lago o de un río pululan bacterias de todo tipo que tu piel tolera bien, pero que no necesariamente quieren estar en contacto con tus zonas íntimas.
Especialmente en una piscina, si el agua no está lo suficientemente limpia y no tiene la cantidad de cloro correcta, te arriesgas muy mucho a coger una infección urinaria. Y al revés: un agua demasiado clorada puede favorecer la aparición de hongos.
- Puede ser muy doloroso
¿Quién dice que el agua ayuda a lubricar? ¡Nada de nada! Más bien al contrario: el agua de mar reducirá bastante, e incluso eliminará totalmente, la lubricación natural.
Lejos de estar como peces en el agua, seréis víctimas de la sequedad, la irritación y la fricción.
Y si es en una piscina, el cloro puede irritar la vulva o la vagina tras el coito. Muy lejos del glamour con el que soñabas desde tu toalla...
- ¡Alerta! ¡ETS a la vista!
Otro riesgo, y no menor, es el de coger una enfermedad de transmisión sexual (ETS). Efectivamente, la fricción causada por la falta de lubricación aumenta el riesgo de que el preservativo se rasgue.
Porque el hecho de hacer el amor en el agua no implica, de ningún modo, que no tengas que protegerte (salvo que así lo hayas decidido con tu pareja, claro). Según Catherine Solano, médica sexóloga, ya sea con o sin agua, si no te has hecho la prueba del sida, no estás vacunado de la hepatitis B o si tú o tu pareja no sois completamente fieles, hay que usar un preservativo siempre
Su consejo: "Cuando se use un condón para hacer el amor en el agua, hay que ponérselo y que quitárselo fuera del agua".
- Bonus track: si no eres acróbata, cuidadito con las caídas
En la bañera o en la ducha, no os paséis de listos: elegid zonas antideslizantes y tened a mano una barra a la que agarrarse... o acabaréis a cuatro patas (y no precisamente en ese sentido).
En una piscina o en el mar, quedaos en un sitio en el que deis pie si no queréis tragar agua.
- Bonus track bis: ¡arriba las manos!
Mucho ojo: tener relaciones sexuales en la calle puede tener multa. Depende de las distintas ordenanzas municipales. Por ejemplo, en Alicante podría conllevar multas de hasta 3.000 euros. En Tossa de Mar está prohibido el sexo en la playa. También algunas playas se han convertido en un filón recaudatorio en multas por "delitos sexuales."
Ya sabes: en verano a palo... seco.