'El Jilguero', de Donna Tartt: el libro del que (casi) todo el mundo habla
Título:El Jilguero
Autora:Donna Tartt
Editorial:Lumen
Páginas: 1.152 (en serio)
Precio: 24,90 euros (Tapa dura) y 12,99 euros (ebook)
Lanzamiento: 13 de marzo de 2014
¿De qué va?
La vida de Theo Decker cambia de forma brutal por un acto brutal: sufre, junto a su madre, un ataque terrorista en el Museo Metropolitan de Nueva York. Ella muere, él sobrevive. En pleno caos, Theo se hace con el cuadro favorito su madre, 'El Jilguero'. A partir de ese momento arranca la iniciación de Theo, un ladrón de cuadros, sí, pero también un huérfano sin rumbo que se mueve por ciudades como Nueva York, Las Vegas y Amsterdam en una ruta atestada de drogas, amistad, dudas y reflexiones.
¿Por qué se habla tanto de este libro?
Porque supone el regreso de Donna Tartt a la literatura tras 12 años de silencio y dos novelas de enorme éxito de ventas y críticas. Muchos aseguran (sin que se les mueva un pelo) que El Jilguero es la la primera obra maestra del siglo XXI.
LEE LAS PRIMERAS PÁGINAS DE 'EL JILGUERO'
¿Quién lo escribe?
Donna Tartt, autora de El Secreto, Un juego de niños y este El Jilguero, con el que ha ganado el premio Pullitzer de Literatura 2014. Sus libros han sido traducidos a una treintena de idiomas.
¿Quién debería leerlo?
Aquellos que estén dispuestos a adentrarse en una historia durante, más o menos, 30 horas de su vida. No es un reto menor:El Jilguero tiene en su edición española casi 1.200 páginas. Su lectura también es recomendable para todos aquellos que quieran ponerse al día con las novelas más interesantes publicadas este año. Y también para quienes buscan literatura de calidad, intimista y con un trama bien construida.
¿Qué ha dicho la crítica?
Nuestra opinión:
Sin duda es una buena novela. Y, también sin duda, está lejos de ser un clásico de la literatura. Libro muy recomendable si se exige algo más a un libro que un buen argumento. Como toda obra que supere el millar de páginas la primera sensación es que algunas, al menos dos centenares, son prescindibles. Pero tampoco molestan. La mayor virtud del libro es que, una vez concluido, se siente nostalgia por lo ya terminado. Lo peor: su final.
El primer párrafo:
"Me encontraba aún en Amsterdam cuando soñé con mi madre por primera vez en mucho tiempo".
La entrevista