25 consejos (aparentemente tontos) que los pediatras dan para evitar accidentes infantiles en casa
Dustin Hoffman sube a su hijo a la encimera mientras prepara tostadas francesas en una sartén con aceite hirviendo.
Seguro que conoces bien la escena de Kramer contra Kramer, probablemente una de las más recordadas de la película, pero seguramente no te has parado nunca a pensar en la peligrosidad de esta acción.
Situaciones así, donde los padres no extreman los cuidados, son determinantes a la hora de que se produzcan accidentes infantiles tanto fuera como dentro del hogar. Solo en 2012 hubo 400.000 en España, de los cuales 90 fueron mortales. Esto convierte estos siniestros en la tercera causa de muerte entre los menores de 15 años en España, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Estas estadísticas preocupan a los especialistas de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) que están convencidos de que los datos podrían cambiar si se extremasen las medidas preventivas y le diésemos más importancia a los peligros que existen a nuestro alrededor.
"El problema es que los padres no son conscientes de que la prevención evita los accidentes y minimiza sus consecuencias", explica Antonio Guzmán, director del Área de Salud y Prevención de la Fundación Mapfre encargada de elaborar junto a la AEPap el estudio Accidentes en la población infantil española. Así no se trata tanto de vigilar al menor y estar con él —el estudio señala que el 66,5% de los accidentes ocurren en presencia de padres o tutores— sino de mantener los peligros a raya. “Hay que pensar que los niños no son peligrosos, son inquietos y curiosos”, recalca Guadalupe del Castillo, pediatra especializada en Atención Primaria.
La llamada cultura preventiva es la clave para solucionar este problema y prueba de ellos es que en España, a medida que esta se ha ido interiorizando en la sociedad, se han reducido los accidentes considerablemente: "Han pasado de un 9,6% en menores de 4 años en 2006 a 6,8% en 2012", apunta Begoña Domínguez, presidenta de la AEPap, e insiste: “En la prevención de accidentes las medidas pasivas son mucho más eficaces que las activas. Cuando no tenemos que hacer nada para evitarlo es más difícil que no se produzcan accidentes". Estas medidas a las que se refiere, son algunas de las que recoge la asociación en su web y que se podrían resumir en los siguientes puntos:
- No dejes nunca a tu hijo solo en casa, especialmente si es menor de 8 años. Casi un 10% de los padres lo hacen.
- No cocines con el niño en brazos.
- Utiliza los fuegos traseros de la cocina para que así no puedan alcanzarlos con las manos.
- Guarda bien los cuchillos, tijeras, cerillas y encendedores.
- Evita que manipulen las llaves del gas y los enchufes
- No pongas sillas ni muebles bajos delante de la ventana.
- Protege las ventanas con elementos que impidan su apertura: rejas, cierres de seguridad, cerrojos fuera de su alcance...
- Fija las estanterías a la pared.
- Protege los enchufes con aparatos a la venta en tiendas especializadas en productos infantiles, para evitar que los más pequeños, por curiosidad, introduzcan los dedos o algún otro objeto en éstos. Le podría provocar un choque por la corriente eléctrica.
- Ten cuidado con el agua del baño y no dejes solos a los niños pequeños en la bañera.
- Procura que no se queden demasiado tiempo solos en una habitación.
- Protege las esquinas de las mesas y muebles con piezas de goma o plástico. Más del 60% de los padres no los utilizan y éstos reducen considerablemente los daños en caso de golpes.
- Recurre a los cierres multiusos. Estos, como señalan desde FACUA, permiten bloquear armarios, cajones, la tapa del inodoro y puertas como la del frigorífico o el horno, evitando que los niños accedan a su interior.
- Utiliza mecanismos para evitar atrapamientos en las puertas. Es un buen sistema para evitar fracturas al cogerse los dedos o daños mayores.
- Cubre los accesos a las escaleras con barandillas que impidan que el menor pueda subir y bajar sin ayuda.
- Guarda los medicamentos fuera del alcance de los niños
- Los productos de higiene y belleza tampoco deben estar a su alcance
- Fíjate que los juguetes sean adecuados para su edad y no corran peligro de atragantarse con partes pequeñas o tragarse una pila de botón.
- No compres juguetes si tienes dudas sobre su peligrosidad: mejor consulta antes la 'Guía de Seguridad de los Productos Infantiles: Productos potencialmente peligrosos, del MInisterio de Sanidad.
- Evita que jueguen en lugares peligrosos como escaleras, ventanas y balcones así como en proximidades de hoyos, pozos, piscinas, etc.
- Almacena los productos de limpieza lejos de los niños
- No reutilices nunca para guardarlos, especialmente cuando son tóxicos, envases de agua o refrescos. ¡Los niños pueden beberlo! Si ocurre llama urgentemente al teléfono de Información Toxicológica: 915620420.
- Cuando termines de planchar no dejes que la plancha se enfríe en la tabla. Quedaría a su alcance y podrían quemarse con facilidad.
- Las cuchillas de afeitar tienen que estar en un sitio cerrado y deben guardarse nada más terminar de usarlas.
- Y si tu casa tiene piscina no dudes en vallarla: las caídas no son los accidentes más frecuentes pero pueden resultar mortales.