Todo lo que necesitas saber sobre el final de la neutralidad de Internet
Puede que sea el final de Internet tal y como lo conocemos. De momento, es Estados Unidos el que abre la puerta a un internet menos democrático con autopistas de velocidad para acceder a algunas páginas y carreteras con baches para otras (las que no se lo puedan pagar).
Ese es el miedo que manifestaron una vez más los defensores de consumidores y webs especializadas cuando, este jueves, la Federal Communications Commision (FCC) -la agencia que regula las comunicaciones en Estados Unidos- lanzó una propuesta con las nuevas normas que controlarán el servicio de Internet. Unas reglas que se votarán a final de año y que acabarían con la neutralidad de la red, o con la idea de que se debería tratar todo el tráfico por igual.
Sin la llamada neutralidad de internet, los proveedores ya no estarían obligados a dar acceso por igual a los contenidos, es decir, se rompería el principio de tratar igual a todas las páginas con independencia de cuál sea su contenido. Quienes defienden la neutralidad de la red -y que llevan años librando esta batalla- sostienen que el acceso especial a determinados contenidos -velocidad más alta a cambio de un coste extra- discriminará a pequeñas y medianas empresas, además de perjudicar la innovación en el sector digital", según explicaCinco Días.
“En definitiva, los consumidores son los que pierden”, señala Todd O’Boyle, director de programas en Common Cause, un lobby de izquierdas centrado en intereses públicos. “Probablemente, webs en las que confían a diario dejen de funcionar de la manera que les había hecho confiar en ellas”, sostiene.
La FCC, en cambio, insiste en que las nuevas reglas no afectarán a los usuarios de Internet. En su blog, Tom Wheeler, presidente de esta organización, asegura que “se habían producido bastantes malentendidos” sobre la propuesta y que no permitiría “comportamientos que perjudicaran a los consumidores ni rivalidades por limitar la apertura de la red”.
Estas son algunas claves para entender los cambios en cuestión:
¿Qué es la neutralidad de Internet y por qué ocurre esto?
La neutralidad de la red consiste en que tu proveedor de Internet debe tratar todo el contenido de la web por igual. En enero, una decisión judicial anuló las normas de la FCC que pretendían evitar que los proveedores de Internet discriminaran mediante el bloqueo o la ralentización de ciertos contenidos.
Esta decisión abrió las puertas para que proveedores de Internet como Comcast y Verizon hicieran un trato con algunos proveedores de contenido, que pagarían por lanzar su contenido en una fast lane (“vía rápida”) de Internet. Después de la resolución, la FCC dijo que revisaría sus normas y esto fue lo que pasó.
¿Qué establecen las nuevas normas?
Las nuevas normas que adelantó The Wall Street Journal permitirían que empresas como Netflix o Skype pagaran a los proveedores de Internet por transmitir sus vídeos y otros contenidos con más rapidez. Con estas palabras lo explicaba el WSJ:
Los defensores de los consumidores aseguran que esto podría crear dos vías en la red: por un lado, superautopistas rápidas que se pueden permitir las grandes compañías y, por otro, una carreterita con baches por el que las webs menos afortunadas se vean obligadas a pasar.
Verizon, que demandó a la FCC por el derecho a hacer este tipo de pactos, afirmó el jueves que no tenía la intención de impedir que los consumidores accedieran a determinados sitios web. Tanto Verizon como otros proveedores de Internet “siempre hemos dejado claro que apoyamos un Internet abierto y que estamos públicamente comprometidos a garantizar el acceso de los consumidores al contenido de Internet que quieran, cuando quieran y como quieran”, declaró la empresa en un comunicado.
La FCC dijo que estos acuerdos serían justos puesto que se pediría a los proveedores de Internet que revelaran cómo manejan el tráfico, cuánto cobran a las empresas por el acceso a “vías rápidas” y si daban un trato preferente a su propio contenido.
Esta última parte podría llegar a ser muy importante debido a que cada vez más proveedores de Internet están pasando a ser empresas de entretenimiento. AT&T anunció esta semana que planea lanzar un nuevo servicio de vídeos online. Comcast posee NBC Universal, que incluye 30 redes por cable, 26 estaciones locales de televisión y parte del servicio de transmisión Hulu.
También se requeriría a los proveedores de Internet que actuaran de una forma “comercialmente razonable” según palabras de la FCC, que votará las reglas propuestas a finales de este año.
Para que me quede claro, ¿en qué me afectaría todo esto?
Para empezar, Internet podría ser más caro. Probablemente el impacto en el usuario medio no se produzca al instante. Pero, con el tiempo, las páginas web podrían pasar la factura a los consumidores por el acceso de alta velocidad, según estima Harold Feld, primer vicepresidente del grupo de consumidores Public Knowledge. Además, resultaría más difícil llegar a determinadas webs que sean propiedad de algunas empresas que no pueden permitirse un acceso a Internet por “vía rápida”, afirmó Feld.
Por otra parte, los usuarios también estarían más confundidos, aseguró este experto. Con las reglas propuestas, la gente tendría que hacerse a la idea de un Internet distinto, dividido, en el que el tiempo de carga de un vídeo dependerá de si la web ha pagado más o menos a su proveedor de Internet. Los consumidores tendrán que empezar a elegir a sus proveedores de Internet en base a las webs que les gusta visitar. Si un proveedor va a primar el acceso de videoclub online que uses o a determinadas webs de consulta habitual, por ejemplo, podrías decantarte por contratarlo.
Feld comparó la situación con las negociaciones exclusivas que AT&T y Apple llevaron a cabo en una ocasión según las cuales solo los suscriptores de AT&T podían comprar el iPhone.
Pues parece bastante desesperante...
Eso parece. Según las reglas propuestas por la FCC, la calidad de los servicios de transmisión online como Netflix o HBO Go dependería de si dichos servicios pagan o no a tu proveedor de Internet, explicaba Feld. “Todo estará más dividido y será más frustrante”, añadió.
Las reglas propuestas no solo podrían afectar al entretenimiento, sino también a la educación. Si los colegios utilizan un programa de estudios online realizado por una empresa que colabora con Verizon, los estudiantes que tengan Internet en casa con Verizon tendrían ventajas sobre los estudiantes que tengan contratado otro proveedor, afirmó Feld.
¿Qué pasa en otros países como España?
Brasil acaba de aprobar en el Senado (por unanimidad) una novedosa legislación que garantiza el derecho igualitario a Internet (que también protege la privacidad de los usuarios después del escándalo de espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos). En este caso, Brasil se negó a eliminar una cláusula de neutralidad que había encontrado fuerte resistencia entre las empresas de telecomunicaciones, porque se les impedirá cobrar más por acceder a contenido que consume más ancho de banda, como la transmisión de video o servicios de voz como Skype. Sin embargo, lo que no ha conseguido Brasil es colar el concepto 'neutralidad de la Red'en el documento final de la NETMundial, el encuentro global sobre la gobernanza en Internet que ha reunido estos días en el país a 800 representantes de 85 países.
Chile fue el primer país en hacerlo, en 2010, y también tiene una normativa similar Holanda.
En España, también hubo una declaración de intenciones a favor de la neutralidad en 2010, cuando el Senado aprobó por unanimidad una moción en la que se instaba al Gobierno para tomar medidas que aseguraran este princpio. Como señalaba El Mundo esta semana: "De momento no hay rastro de movimientos por parte del ejecutivo encaminados a la consagración de este principio de neutralidad de la Red, sin el cual Internet no existiría tal y como existe hoy".
Timothy Stenovec y El HuffPost contribuyeron a este artículo, publicado originalmente en HuffPost Tech. Traducción de Marina Velasco Serrano