Alrededor de un centenar de inmigrantes entran en Melilla tras asaltar la valla
Un centenar de inmigrantes subsaharianos han conseguido acceder a la ciudad autónoma de Melilla tras un nuevo asalto masivo a la valla fronteriza, que ha estado protagonizado por unas 500 personas. El último asalto ha dejado a 27 personas heridas, 14 de ellos inmigrantes y el resto agentes de las fuerzas del orden marroquíes, según un comunicado del ministerio marroquí del Interior.
Según la nota, los inmigrantes, que hicieron su asalto desde la zona llamada Tigorfatín, "no obedecieron a los requerimientos habituales (de los policías) y pasaron a lanzar pedradas, que causaron trece heridos entre las fuerzas del orden", quienes por su parte procedieron al arresto de 96 personas.
Fuentes de la Delegación del Gobierno han relatado a la agencia Efe que el asalto se ha producido sobre las 07.50 horas en la zona comprendida entre la Vaguada Linares y Río Nano cuando unos 500 subsaharianos, "provistos de palos y piedras", se abalanzaron sobre la alambrada, intentando superar primero a las fuerzas de seguridad marroquíes y posteriormente la doble valla de seis metros de altura cada una y a la acción de la Guardia Civil.
De esos 500, unos 100 lo han logrado. La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) en Melilla eleva esa cifra a 200. La AUGC también ha denunciado "la especial violencia" de los subsaharianos que han hecho este intento, "más agresivos" que en otros saltos.
Los inmigrantes que han logrado pasar se han dirigido al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) a la carrera, donde ya aguardaba una ambulancia, y de ahí se dirigirán a la Comisaría para la apertura del expediente de expulsión en aplicación de la Ley de Extranjería. Un papel que les servirá para poder ser acogidos en el CETI --donde tendrán derecho a manutención, alojamiento y sanidad-- hasta que se tramiten sus expedientes, que en la mayoría de los casos no pueden ser finalizados con la expulsión porque los países a los que dicen pertenecer no les reconocen como nacionales propios.
Tras una espera media de seis meses, son trasladados a la Península e internados en los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) durante 60 días, y si no se puede materializar su repatriación, quedan libres, en una situación alegal, permaneciendo en España o yendo a otros países de la Unión Europea.
SEGUNDO ASALTO EN UNA SEMANA
Se desconoce, por el momento, el número de heridos que se han producido, una información que la Delegación del Gobierno está recabando.
Se trata del segundo asalto masivo que se produce en apenas una semana, ya que el pasado lunes otros 150 inmigrantes consiguieron entrar a Melilla.
La extrema presión migratoria que vive la ciudad en los últimos meses mantiene en alerta constante a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, al tiempo que tiene colapsado el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), que se encuentra por encima del doble de su capacidad.