El PP asegura que "no va a haber fisuras" en el partido a la hora de votar la reforma del aborto
A pesar de las voces críticas que han aparecido en los últimos días, el PP sostiene que "no va a haber fisuras" en dicho grupo a la hora de apoyar la reforma de la ley del aborto, porque el partido tiene una "posición clara" que plasmó en su programa electoral.
Así lo ha expresado el secretario general del PP en el Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro, que incluso ha asegurado que los diputados populares "siempre votan libremente" aunque, ha añadido, "en coherencia con lo que defiende" el programa del partido.
La posición de los populares sobre el aborto "es clara" y así se ha plasmado en congresos y en los órganos de decisión que aprobaron el programa, ha insistido el secretario general del grupo, quien también ha dicho que no hay temor a que vaya a haber diputados que rompan la disciplina de voto.
Por otro lado, el dirigente del grupo popular ha insistido en que tiene "poca lógica" que los grupos de la oposición soliciten ya las comparecencias de miembros del Gobierno sobre esta reforma cuando el texto es todavía un anteproyecto de ley que se tiene que remitir a distintos órganos, y no ha sido por tanto remitido a las Cortes.
Cuando así ocurra, y la reforma sea ya proyecto de ley, será el momento de valorarla en el Congreso, ha añadido.
"NO ES UN DERECHO"
En línea con las explicaciones que se han dado el Gobierno y la dirección del partido, José Antonio Bermúdez de Castro ha insistido en que el aborto "no es un derecho" y "ningún organismo internacional" lo define como tal.
El aborto, ha continuado, es "un drama", una decisión "traumática" que tiene que ser siempre "una excepción".
Por eso la reforma de la ley busca, ha añadido, la "defensa de la vida" y vuelve al "consenso" de la normativa de 1985, que funcionó durante veinticinco años hasta que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero lo "rompió" de forma "unilateral" y provocando en el país una "gran fractura" sobre esta cuestión.
Además, ha subrayado que ante el aborto "la mujer es siempre víctima y no es culpable" y por eso con la reforma "ninguna mujer tiene que ir a la cárcel o ser multada", y también ha valorado que se elimine el "disparate" de que las menores puedan interrumpir un embarazo sin conocimiento y consentimiento de sus padres.