EEUU implica a España y Francia en el espionaje masivo
Los documentos facilitados por Edward Snowden fueron malinterpretados y en realidad el seguimiento de millones de comunicaciones de franceses y españoles fue llevado a cabo por las agencias de inteligencia europeas. Esa es la tesis de altos cargos de la inteligencia de EEUU, según la versión publicada por el diario The Wall Street Journal.
Según el diario, el espionaje telefónico, que ha desencadenado una tormenta política entre la Unión Europea y EEUU, es responsabilidad de los servicios secretos de Francia y España. Una vez hecho el seguimiento, ambos países habrían facilitado a la Agencia Nacional de Seguridad de EEUU (NSA) los registros. Lo filtrado por Snowden no sería sino una relación hecha por la NSA de un trabajo hecho en Europa. El artículo, que no cita nombres ni expresiones textuales, deja fuera de la relación de países a Alemania, donde la canciller alemana, Angela Merkel, habría sido también espiada.
El máximo responsable de la NSA, el general Keith Alexander, desmintió las informaciones que apuntan al seguimiento de 60 millones de comunicaciones en España y 70 en Francia. "Las afirmaciones de perioditas en Francia, España e Italia de que la NSA recopiló decenas de millones de llamadas de teléfono son completamente falsas", dijo en una audiencia ante la Cámara de Representantes. "Para ser perfectamente claro: no se trata de información que nosotros hayamos recopilado", añadió.
"La persona que robó el material clasificado no entendió lo que estaba viendo", ha dicho Alexander.
El escándalo del seguimiento de comunicaciones ha provocado un aluvión de críticas desde la UE. Este lunes, la comisaria de Justicia, Viviane Reding, criticó este lunes y en Washington el espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional de EEUU (NSA). "Los amigos no se espían el uno al otro... El espionaje no genera confianza", ha advertido en una conferencia en la Universidad Johns Hopkings de la capital estadounidense.
Reding ha dicho que las revelaciones sobre el espionaje masivo de EEUU, que incluyen a líderes europeos y a ciudadanos, han "agitado y dañado" las relaciones bilaterales.
OBAMA, BAJO PRESIÓN
Una semana después de que medios de comunicación publicaran que el espionaje de Estados Unidos llegó al mismísimo teléfono móvil de la canciller alemana, Angela Merkel, Obama está bajo la presión de tomar medidas que tranquilicen a los estadounidenses y sus aliados.
Un funcionario de alto nivel de la administración en Washington ha indicado que Estados Unidos ha hecho algunos cambios puntuales en las prácticas de vigilancia secreta pero que aún tiene que modificar ampliamente la política de espionaje, como terminar con la recolección de datos de inteligencia de aliados. Según este funcionario, la Casa Blanca está evaluando una prohibición a la recolección de información de líderes aliados.
Entretanto, antes de fin de año se espera que esté completa una revisión ordenada por Obama después de que el ex contratista Edward Snowden hiciera públicos documentos de la NSA.