El Congreso estudiará la razón por la que se 'desnudó' a una invitada del PSOE
El Congreso de los Diputados va a investigar la denuncia del PSOE de que una de sus invitadas fue desnudada como condición "imprescindible" para acceder a la tribuna.
Según la denuncia del PSOE, el miércoles pasado la policía cacheó a una mujer, profesora de la Universidad de Alicante, a la que dejó en ropa interior, señala el texto, para permitirle sentarse en la tribuna de invitados del Congreso, una condición -sostienen los socialistas- que no se impuso al resto de asistentes a las tribunas.
Estos hechos "vejatorios" se produjeron, de acuerdo con el PSOE, una semana después del incidente en el que tres activistas de Femen, también desde la tribuna de invitados, protestaran, a pecho descubierto, contra la ley del aborto que prepara el Gobierno.
El presidente del Congreso, Jesús Posada, ha defendido la actuación proporcionada de la Policía y, prueba de esta forma de actuar "equilibrada", ha dicho, es que se ha producido algún incidente que otro, pero, no obstante, considera que "es mejor que haya un incidente de vez en cuando que tener unas medidas muy rígidas que excluyan todo".
En declaraciones a los periodistas, ha asegurado que, por norma general, las medidas que adopta la policía que está al cargo de la seguridad del Congreso han sido siempre "muy proporcionadas" y, de hecho, él prefiere que sea así -ha subrayado-, aunque puedan producirse algún percance aislado.
Jesús Posada ha remitido la denuncia del PSOE a los servicios de la Cámara y al comisario, "y ellos me explicarán" qué ha pasado y qué medidas adoptaron en este caso.
"INDIGNADA Y HUMILLADA"
La invitada del grupo parlamentario socialista relató en un artículo este domingo en Información lo ocurrido y ha afirmado este martes a Efe que se siente indignada y humillada por el "cacheo integral" al que fue sometida por la policía de la Cámara Baja.
Mar Esquembre ha señalado que presentará una denuncia por lo ocurrido contra las dos agentes que le cachearon y también contra el presidente de la Cámara "por ser constitucionalmente el responsable de las funciones de la policía del Congreso".
Ha relatado que, con motivo de un viaje para participar en un congreso de Derecho Constitucional en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), viajó a Madrid y decidió pasar por el Congreso para comer con unos amigos que trabajan en el grupo parlamentario del PSOE.
Acudió al control de acceso en compañía de una de estas personas que desde hace muchos años trabajan como asesores en el Congreso para el PSOE, y una vez allí, los agentes se sorprendieron de que el segundo apellido de su DNI no coincidiera con el de la lista de invitados que había facilitado el grupo socialista.
Esquembre ha aclarado que este malentendido, del que cree que pudo ser "el detonante" del incidente, se debe a que su madre biológica falleció cuando era pequeña y su padre se casó en segundas nupcias, y a que recientemente ha culminado un expediente de adopción de su segunda madre para tomar el apellido de ésta.
Pese a que la asesora del PSOE que había hecho la lista y que le acompañaba asumió su error y trató de explicar a los agentes la causa del desajuste, a Esquembre le dijeron que para acceder debía someterse a un "cacheo integral".
"Supuse que me iban a tocar por encima de la ropa por si llevaba armas u objetos peligrosos o prohibidos, pero me condujeron a un cuartito y dos agentes mujeres jóvenes me pidieron que me quitara la americana y la camiseta", ha recordado.
"ME TUVE QUE QUITAR LA CAMISETA"
"Les pedí que dieran una razón para quitarme la camiseta y me contestaron que estaban aplicando el protocolo de seguridad, así que me la tuve que quitar y luego tuve que bajarme los pantalones hasta los tobillos", ha proseguido.
Esquembre ha indicado que las agentes no le tocaron y que, una vez vestida, una de las policías le acompañó a la tribuna de invitados y se sentó a su lado, con una butaca vacía de separación.
"Fue una sorpresa", ha subrayado la profesora de Derecho Constitucional, "cuando veo que se sienta y que me acompaña porque, además, hubo momentos que estábamos solas en la tribuna. Allí se quedó conmigo hasta que a la media hora me volví para decirle que me iba a marchar porque había quedado, y se levantó y me acompañó hasta la salida".
Esquembre se siente "absolutamente indignada y humillada" por esta "extralimitación en toda regla" y, tras lamentar que la convirtieran "en sospechosa desde el primer instante", se ha preguntado: "qué pensaban que iba a hacer en la tribuna, ¿gritar?".
Asegura que aún no ha presentado la denuncia por falta de tiempo, ya que ha seguido dando clases en la Universidad de Alicante aunque lo hará en breve porque "esto no se puede dejar pasar".
En su opinión, este tipo de actuaciones están dirigidas a "limitar la libertad" de los ciudadanos ante la sospecha de que alguien pueda actuar "contra el orden establecido".