Sexto encierro de San Fermín 2013: primeros heridos de asta de las fiestas (VÍDEO, FOTOS)
El sexto encierro de San Fermín se ha saldado con tres heridos por asta de toro, según han informado los servicios de emergencia. Los toros de la ganadería salmantina del Pilar han protagonizado una peligrosa carrera en la que uno de los bureles se ha quedado separado del resto y ha arremetido en varias ocasiones contra los mozos.
Aunque el primer parte médico hablaba de cuatro corredores corneados, el Complejo Hospitalario de Navarra ha confirmado que son tres los hospitalizados con cornadas: un estadounidense de 20 años, con una herida por asta en el abdomen; un barcelonés de 42 años, con dos heridas similares en el brazo derecho y un joven de Morella, Castellón, que ha sufrido tres cornadas, dos en la ingle derecha y una en la pierna izquierda.
También han sido trasladados al hospital tres corredores más con contusiones leves.
UNA CARRERA RÁPIDA
La carrera, que ha roto la racha histórica de cinco encierros sin cornadas, había comenzado rapidísima cumpliendo con la fama de veloces de estos animales, aunque el comportamiento del astado descolgado la ha hecho la más larga de los sanfermines 2013 al sumar 4 minutos y 57 segundos..
La manada ha salido puntual a las 08.00 horas de los corrales de Santo Domingo, con todos los cabestros agrupados a la cabeza y seguida de los seis toros del Pilar muy compactos, que rápidamente han seguido el fuerte ritmo que han imprimido los mansos, de forma que uno de los toros colorados ha escalado posiciones.
Pese a la caída de uno de ellos, la carrera ha continuado veloz y, a final de la cuesta, un corredor ha sido alcanzado por uno de los toros del Pilar y ha recibido un puntazo, la primera herida por asta en los seis encierros de los sanfermines de este año.
UN TORO REZAGADO
La torada ha atravesado la plaza del Ayuntamiento y ha empezando a separarse en grupos, una disposición en la que ha tomado la Curva sin problemas y ha enfilado la Estafeta, con tres cabestros y cuatro toros en cabeza, otro bravo a unos metros y el sexto, el que causaría los mayores problemas, ya comenzando a rezagarse.
Con este último toro fijándose mucho en los mozos, la carrera ha ido avanzando por la Estafeta, sin mayores problemas excepto la velocidad imprimida en el caso del grueso del grupo por delante, y con enorme peligro en el del toro definitivamente separado del resto, que poco después ha provocado los momentos más angustiosos.
Ha sido a mitad de la Estafeta cuando ha embestido a un grupo de corredores y ha perdido el equilibrio y, al levantarse, cuando parecía que iba a continuar su camino, ha conseguido alcanzar a uno de esos mozos, lo ha tirado al suelo y le ha corneado durante un angustioso medio minuto.
Los mozos y los pastores que le rodeaban han intentado quitarle de encima al animal, que repetidamente volvía sobre el corredor, hasta que finalmente han logrado que éste desviase su atención del joven y continuase algo despistado su camino.
Poco a poco ha enfilado el último tramo de la calle, siguiendo las llamadas de los corredores, que hoy han sido fundamentales para evitar peores consecuencias, aunque la actitud del toro ha continuado causando problemas.
Al llegar a Telefónica, el mismo toro ha embestido contra los corredores y contra el vallado. Al menos uno de los mozos ha recibido un puntazo.
El toro se ha parado, se ha girado y ha vuelto a ser reconducido por a punta de periódico hasta llegar a la entrada del coso taurino, donde le esperaban los dobladores, que le han conducido ya sin incidencias hasta los chiqueros de la plaza.
