Portas, el ministro de Exteriores que dimitió, toma el timón de la economía portuguesa
Las finanzas de Portugal quedan en manos de Paulo Portas, que ha pasado en menos de una semana de ser exministro de Asuntos Exteriores a viceprimer ministro de Portugal, cargo crucial en materia económica. Tras la designación de Portas, el Centro Democrático Social se anota una victoria ante el ala dominante del Gobierno, el Partido Social Demócrata liderado por el primer ministro, Pedro Passos Coelho.
En medio de un clima de agitación social y de dudas respecto a la efectividad del primer rescate, Portas se ha movido con habilidad alzándose con el puesto clave del Gobierno luso. Con una nueva ayuda financiera sobrevolando el horizonte, Portugal afronta su comparecencia ante el Eurogrupo, en la que deberá convencer al Banco Central Europeo de la "solidez" de la recién formada coalición.
La convulsión política —que dejó en la Bolsa una caída del 5,5%, entre las peores de la historia—comenzó con el abandono de Portas. El hasta entonces ministro de Asuntos Exteriores y crítico en numerosas ocasiones con la política de austeridad del primer ministro Passos Coelho, anunció su dimisión "irrevocable" ante el nombramiento de una nueva ministra de Economía, Maria Luís Alburquerque.
Alburquerque, continuista con la línea económica gubernamental y con la aceptación incondicional de las medidas de la troika, era la secretaria del Tesoro y mano derecha de Vitor Gaspar, anterior ministro de Finanzas y uno de los hombres fuertes de Coelho. Para Portas, Alburquerque no era "la persona adecuada", y su nombramiento se había producido "sin consenso". Aún así y por ahora, la ministra mantiene su cartera.
Passos Coelho no aceptó la renuncia de Portas, y desde entonces se sucedieron varías conversaciones para intentar alcanzar un acuerdo. Anibal Cavaco Silva, presidente de la república, realizó las funciones de mediador, y para avalar la coalición naciente exigió que esta fuera "duradera" y "fuerte".
AIRE HASTA LAS ELECCIONES
El Partido Social Demócrata de Passos Coelho y Cavaco (con 108 de los 230 diputados) y el Centro Democrático Social-Partido Popular de Portas (con 24) mantendrán la coalición los dos años que restan de legislatura, aseguraron durante el anuncio del acuerdo, y concluirán, en 2014, el programa de rescate.
Tras una semana de surrealismo político, Portugal intentará convencer hoy al Eurogrupo de la solvencia y estabilidad de su recién estrenada coalición.