Detenido "monseñor 500", exresponsable de administrar el Banco Vaticano, por blanqueo de dinero
Un alto prelado italiano, un agente de los servicios secretos de Italia y un intermediario financiero han sido detenidos acusados de fraude y corrupción, en una investigación sobre las presuntas irregularidades en la gestión del llamado banco del Vaticano.
El prelado detenido es Nunzio Scarano, alto prelado de la ciudad de Salerno, al sur del país, que era conocido como "monseñor 500", porque siempre portaba billetes de ese valor, según explica el diario Corriere della Sera.
Ahora, con la investigación que ha abierto la policía fiscal de Italia, se entiende el apodo que tenía, ya que Scarano llegó a sacar 600.000 euros en efectivo de una cuenta del Banco Vaticano en cantidades de 10.000 euros. El dinero lo entregaba a varios cómplices que los convertían en cheques que el obispo ingresaba en una cuenta de un banco italiano para pagar una hipoteca.
Scarano era contable de la administración financiera del Vaticano y ha sido detenido en una parroquia de las afueras de Roma, según ha informado su abogado. El prelado había sido suspendido de sus funciones hace unas semanas con motivo de la apertura de una investigación judicial sobre su gestión.
INVESTIGACIÓN DE 2010
La detención del obispo y las otras dos personas se enmarcan en la investigación emprendida en 2010 por la justicia italiana contra los entonces presidente y director general del Banco Vaticano, Ettore Gotti Tedeschi y Paolo Cipriani, por violar las normas que impiden blanquear dinero.
Estas detenciones se enmarcan en la investigación emprendida en 2010 por la Justicia italiana contra los entonces presidente y director general del IOR, Ettore Gotti Tedeschi y Paolo Cipriani, por violación de las normas para impedir el blanqueo de dinero.
Las detenciones se producen después de que el pasado miércoles, el Vaticano informara de que el papa había nombrado una comisión, formada por cinco miembros, que se dedicará en los próximos meses a investigar todo lo que ocurra en el banco del Vaticano, envuelto desde hace años en numerosos escándalos financieros, para una posible reforma.