El Banco de España celebra la dimisión de Alfredo Sáenz porque fortalecerá al sistema financiero
El Banco de España está satisfecho por la dimisión del consejero delegado del principal banco del país. Según fuentes de la institución consultadas por EFE, la renuncia de Alfredo Sáenz es "positiva" porque contribuirá a "fortalecer la solidez del sistema financiero español".
El Banco de España ya conocía la decisión y ha eludido criticar su tardanza, asegurando que tiene "la más alta estima" sobre sus cualidades "personales y profesionales".
El Banco de España tenía abierto un procedimiento para determinar la honorabilidad de Sáenz y su idoneidad para seguir desempeñando su cargo de consejero delegado, tras aprobar el Gobierno medidas que modificaban los requisitos de honorabilidad.
Fuentes del sector consultadas por EFE aseguran que el proceso aún sigue en marcha, porque el Banco de España no ha recibido comunicación formal alguna sobre el asunto, aunque aventuran que lo más probable es que el expediente se cierre.
La renuncia de Sáenz se produce después de que el Tribunal Supremo confirmara el pasado 19 de abril una sentencia en la que anulaba parcialmente el indulto que le había concedido, lo que le permitiría recurrir en amparo al Tribunal Constitucional.
En una providencia, el Supremo rechazó el incidente de nulidad que el banquero interpuso para pedir la suspensión de dicha sentencia, dictada el pasado 20 de febrero, al considerar que no se ha vulnerado su derecho a una tutela judicial efectiva.
ACUSACIÓN FALSA
Sáenz fue condenado en marzo de 2011 por el Supremo por un delito de acusación falsa contra unos deudores de Banesto, entidad que presidió tras ser intervenida en 1993.
Aunque en un primer momento la Audiencia de Barcelona le condenó a seis meses de prisión, Sáenz recurrió ante el Supremo, que rebajó la pena a tres meses de cárcel e inhabilitación para ejercer su cargo.
Posteriormente, en noviembre de 2011, Sáenz fue indultado por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, aunque después el Supremo anuló parcialmente la medida de gracia.