Muere José Luis Sampedro: muerte del escritor y economista a los 96 años
Escritor, economista, humanista y, en sus últimos años, ya nonagenario, uno de los 'abuelos', junto a Stéphane Hessel (autor de Indignaos), que apoyó y reivindicó movimientos como el 15-M. José Luis Sampedro ha muerto a los 96 años. Falleció el domingo y ya ha sido incinerado, pero por su expreso deseo no se ha conocido la noticia hasta ahora, ya que, según su viuda, no quería un "circo mediático".
La muerte de José Luis Sampedro, autor barcelonés, llega tras casi un siglo de vida dedicada a las letras, con una premiadísima trayectoria y obras tan conocidas como La sonrisa etrusca (1985) o El amante lesbiano (2000). "El dios de esta civilización es el dinero", declaró en uno de sus encuentros con Hessel en Madrid Sampedro, que antes de la Guerra Civil ya estaba trabajando (había logrado una plaza como funcionario de aduanas en Santander).
"Me voy a morir pronto, pero satisfecho", decía en 2011, tras recibir el Premio Nacional de las Letras, este autor y economista, que en 1940 había pedido el traslado a Madrid, donde se licenció en Económicas en 1947. Entonces ya había escrito sus dos primeras novelas, que no serían publicadas hasta los 90 (La estatua de Adolfo Espejo, 1939) y (La sombra de los días, 1947).
Se mantuvo con lucidez hasta el final, muy crítico con el sistema actual. "Después de cada telediario decía que lo que ha costado conseguirse 30 años estos se lo cargaban en un año", ha recordado Olga Lucas, su viuda, en Cadena Ser, donde ha explicado que falleció a la 1.00 de la mañana del lunes y que le había dejado instrucciones para no hacerlo público. Aquí puedes recordar una entrevista de José Luis Sampedro en esta emisora. "La vida no hay quien la pare", decía. "Tendríamos que indignarnos mil veces más", afirmaba.
"Entre los no pocos atributos que podrían destacarse de Jose Luis Sanpedro, uno de los más valiosos y anticipadores fue su capacidad para divulgar el conocimiento económico. Su habilidad para interesar a lectores distantes de la profesión y para hacerlo con las habilidades que años después podría suficientemente de manifiesto en su producción literaria. Junto a ello, su trayectoria y compromisos, son una referencia fundamental para los economistas españoles", apunta a El Huffington Post Emilio Ontiveros, presidente, AFI, y catedrático de Economía de la Empresa, UAM.
"El no tenía miedo. Entendía la muerte como el último acto vital", ha afirmado en Cadena Ser su viuda, con la que se había casado en 1993. "El arte de la vejez es arreglárselas para acabar como los grandes ríos, serena, sabiamente, en un estuario que se dilata y donde las aguas dulces empiezan a sentir la sal y las saladas, un poco de dulzura. Y cuando te das cuenta ya no eres río sino océano. Eso es lo que pretendo", decía.
"Nos dijo que quería beberse un Campari, así que le hicimos un granizado de Campari. Me miró y me dijo: 'Ahora empiezo a sentirme mejor. Muchas gracias a todos'. Se durmió y al cabo de un rato su murió", ha relatado su viuda.
"Que se le llore lo menos posible y que se siga luchando lo máximo posible", ha pedido la viuda de Sampedro que, a lo largo de su trayectoria, trabajó en el Servicio de Estudios del Banco Exterior de España y fue catedrático.
En 2010 el Consejo de Ministros le otorgó la Orden de las Artes y las Letras de España por su "sobresaliente trayectoria literaria y por su pensamiento comprometido con los problemas de su tiempo".
El cuerpo de José Luis Sampedro, académico de la Lengua desde principios de los 90, ha sido incinerado este martes por la mañana len el cementerio de La Almudena en la más estricta intimidad.