Draghi pide "reconocer el enorme progreso obtenido" por España pese a que no se vean los resultados

Draghi pide "reconocer el enorme progreso obtenido" por España pese a que no se vean los resultados

EFE

Tras una comparecencia a puerta cerrada, Mario Draghi habló. Y lo hizo para suavizar la imagen que el Banco Central Europeo tiene en España. ¿Insensible? ¿Fuente de presiones para que el Gobierno haga ajustes?

El presidente del BCE cree justo "reconocer los esfuerzos que están llevando a cabo los ciudadanos de España". "Las situaciones económica y social son muy difíciles y la gente lo está pasando muy mal. Pensamos en todos aquellos que han perdido sus puesto trabajo y sobre todo en los más jovenes". España va "por el buen camino", añadió el presidente de la máxima institución monetaria, que ve "signos de estabilización" que darán sus frutos.

Draghi llegó a Madrid en son de paz y lo cierto es que no mencionó ninguna de sus habituales advertencias. Ni recordó sus presiones para que España pidiese a sus socios un rescate completo de la economía (condición para recibir ayuda sin límites del BCE), ni las cartas que su institución escribió en el pasado al Gobierno exigiéndole hasta un cambio en la Constitución.

Todo lo contrario.

"Si echamos la vista atrás", dijo, "tendrán que reconocer el enorme progrso obtenido" por España, "no solo en los mercados financieros" en los que el país logra financiarse sin ayuda.

¿Utilizará el BCE su capacidad para hacer que aflore el crédito? El presidente del BCE no contestó y se limitó a exhibir lo ya hecho. ¿Flexibilizará la interpretación de su mandato para apoyar el crecimiento, como hacen otros bancos centrales? Ni una palabra. ¿Pedirá más medidas a España? La pregunta sigue abierta.

CAMINO MUY COMPLEJO

"El camino muy complejo. Ningún país ha terminado su trabajo", se limitó a decir, recordando que las intervenciones de Fráncfort "impidieron que a finales de 2011 y principios de 2012 hubiese una crisis de financiacion de proporciones mayúsculas para España y para resto países".

En un momento en el que los países con problemas parecen ser cada vez menos soberanos en favor del BCE, el gran debate entre Fráncfort y Madrid se quedó en una visita cortés y muy cuidada en las formas. Tanto que la mayor parte estuvo a punto de ser secreta; algo evitado por varios diputados de izquierdas.

LEE AQUÍ LAS PALABRAS INTRODUCTORIAS DE MARIO DRAGHI A PUERTA CERRADA