Lotería de Navidad 2012: Siete historias para sonreír aunque no te haya tocado ni un euro
El Gordo y los demás premios de la Lotería de Navidad han repartido felicidad por los más diversos rincones de España. Aunque la mayor parte de los españoles tiene que seguir repitiendo la famosa frase de que "lo más importante es la salud", el sorteo ha dejado algunas historias optimistas en medio de la crisis y las continuas malas noticias. Aquí tienes siete de ellas.
1-. Los trabajadores de la fábrica con un ERE en Alcalá de Henares. El Gordo de este año, el 76.058, premiado con 400.000 euros al décimo, ha regado de millones la ciudad madrileña de Alcalá de Henares, en donde se han vendido 130 series del número. Una gran cantidad de trabajadores de la fábrica Cametal, situada en las afueras de Alcalá de Henares y afectada por un ERE, había comprado décimos del número. Como señalaron a Europa Press desde la administración situada en la calle Chorrillo, 4, del municipio complutense, el número entre estos trabajadores no se ha vendido en participaciones, sino en décimos, por lo que están "muy felices". Asimismo, han indicado que no saben la cifra exacta de dinero que han podido repartir con este premio.
2-. La familia con todos los miembros en el paro. El Gordo también ha alegrado el día a una familia de Benidorm (Alicante) con tres hijos mayores de edad, los cinco desempleados. El boleto ha sido vendido por un kiosko de prensa situado en la avenida Mont Benidorm, en el edificio Coblanca 27, cuyo vendedor, Víctor Tamblor, ha explicado a Efe que la madre compró hace unos días la papeleta del 76.058.
Según el lotero, este sábado la madre se acercó al establecimiento para celebrar el premio y ha relatado que tanto ella como su marido y los cinco hijos están en paro y que el dinero les viene "de maravilla". Ha comentado que, incluso, una de sus hijas estaba a punto de perder el piso, por lo que el premio llega en el momento justo.
3-. El jubilado que compró 10 décimos del Gordo. Un hombre de la localidad madrileña de Alcalá de Henarés ha sido agraciado con el Gordo con cuatro millones de euros, los que corresponden, tal y como ha dicho a EFE, a los diez décimos que compró para este sorteo y que ha repartido entre sus familiares. Su nombre es Antonio Ortega y de los diez décimos tres se los guardó él y el resto los repartió entre sus dos hijos y familiares.
Ortega se ha jubilado este año de su trabajo como pintor, y dice que va a emplear buena parte de lo que le ha tocado para arreglar su vivienda o comprarse otra, pero también tiene claro, y se emociona cuando lo comenta, que este dinero lo va a dedicar también a ayudar a un amigo.
4-. El sueño del cuñado. Hace 23 años Manuel Leal soñó que el número 64.084, que entonces se vendía en Burgos, iba a ser premiado, y eso llevó a su familia a venderlo en Málaga cada semana, hasta que ahora su cuñado, Diego Fernández, ha llevado la alegría a la ciudad al vender 370 décimos del tercer premio de la lotería de Navidad.
Diego, de 77 años, lleva este número al que están abonados muchos clientes de la zona de Fuente Olletas y los barrios de Ciudad Jardín y Las Flores de la capital malagueña porque su hijo "no lo quería tener en el bar" porque le habían robado dos veces la lotería y porque le resultaba un "engorro", aunque "cuando toca -ha precisado- no lo es".
Él ha repartido 18,5 millones de euros al vender gran parte de las 56 series -28 millones de euros- que ha distribuido la administración número 45, situada en la Plaza Olletas, una zona "muy necesitada", según el titular de la administración, Javier Martín.
5-. El aceitunero que evita el desahucio Su fotografía ha sido portada de todos los diarios digitales y en muchos foros ya ha sido bautizado como 'el cuñao', por su característica sonrisa. El País cuenta su historia: Francisco Castaño, aceitunero, soñó el número del Gordo hace dos días y corrió a comprarlo. Ahora, dejará el tajo del olivar y evitará el embargo de su casa. “Gano 70 euros con mucho sufrimiento, y con 63 años a mis espaldas”, subrayaba. “Me iban a embargar mi casa, pero ya no lo harán. No quiero nada con los bancos”, añadió.
6-. El primer Gordo en Huelva. Pedro Medina, vecino de la localidad onubense de Villarrasa (Huelva), conquistó por primera vez en esta provincia el primer premio de la Lotería de Navidad con el 76.058, décimo que compró su mujer coincidiendo las dos últimas cifras con la fecha del nacimiento de ambos.
En declaraciones a los periodistas en la puerta de su casa y rodeado de sus familiares y amigos, Pedro ha mostrado "su felicidad" por este premio, que le convierte en el primer onubense que ha sido agraciado con el Gordo con un décimo comprado en la provincia. Y todo gracias al 76.058 que compró por máquina en un estanco de la localidad. Ha asegurado que "seguirá trabajando" como jefe de maquinaria de una planta de residuos sólidos urbanos y ha apuntado que por ahora los nervios no le dejan saber lo que hará con el dinero y esperará a "sentarse con su mujer cuando estén más tranquilos" ha apuntado tras dejar claro que "ayudará a sus hijos".
Convencido de que su pequeña nieta de apenas un mes "ha traído un pan debajo del brazo y mucha suerte", ha remarcado que estaba en casa cuando se ha enterado por llamadas de amigos que el premio había caído en Villarrasa y que había sido "el único" agraciado de la localidad.
7-El Gordo cae en El Gordo. Varios décimos del el Gordo de la Lotería de Navidad han llegado a vecinos de la localidad cacereña de El Gordo. Según ha señalado Antonio, vecino de El Gordo poseedor de uno de dichos décimos, dichos boletos habían sido comprados en Alcalá de Henares (Madrid).
De esta manera, el número 76.058 ha hecho que ciudadanos de esta localidad celebren el día de 'El Gordo', haciendo así mención al nombre de su pueblo, que no posee administración de loterías.