Juguetes de Navidad 2012: ¿será la Monster High la muñeca de la Navidad otra vez? (FOTOS)
La idea es tan sencilla como potente: unas chicas, poco más que unas niñas, van juntas al instituto y comparten cotilleos, gustos y ropa con sus amigas. Solo que son unas chicas diferentes. Son hijas de monstruos: de Drácula, la Momia, o el Hombre Lobo. Y por eso son normales pero no lo son, tienen atributos pero también ciertos defectos, desde miedo a la oscuridad a no poder reflejarse en los espejos. Esas son las Monster High, y solo en España se vendieron 850.000 de sus muñecas el pasado año. Este año pueden seguir batiendo récords, aunque conseguirlas ya no será una odisea.
"Había colas de gente esperando a las seis de la mañana, bajo cero. He visto muchos booms de juguetes: cuando salieron Las Tres Mellizas, la Casita de Mickey… pero quizá las Monster High se han mantenido en el tiempo, ha sido algo bastante intenso". Así rememora la búsqueda de una muñeca durante las navidades de 2011 Victoria Messeguer, gerente de la tienda de juguetes Toys'r Us de Alcobendas (al norte de Madrid), en la que trabaja desde hace seis años. Pero lleva 15 en la industria del juguete, tiene claro de lo que habla. Conoce las tendencias, las subidas y las bajadas, las desesperaciones del día cinco de enero.
El éxito de las Monster High, producidas por la empresa estadounidense Mattel, era casi obvio, pero pocos imaginaron que iba a ser tan fulgurante. En realidad, las muñecas llegaron en octubre de 2010, pero fue a lo largo de 2011 (gracias a series de televisión, una trilogía de novelas, revistas, coleccionables, perfiles en Facebook y Twitter, un blog en Tumblr, canales de YouTube) cuando la bola de nieve fue haciéndose cada vez más rápida y grande. "[El mundo de las Monster High] es el reflejo de la vida de cualquier preadolescente. Conecta a la perfección con ellas porque habla su mismo idioma y trata los sucesos de su día a día. Les lanza el mensaje de que nadie es perfecto pero no por ello menos especial. Al contrario, les anima a ser diferentes siendo ellas mismas y respetando a los demás", considera Elvira Sanjurjo, directora de márketing de Mattel España.
DRACULAURA Y COMPAÑÍA
Y parece cierto: conecta tanto con ellas que ha conseguido hacerlas imbatibles. Las pasadas navidades, desde las grandes superficies a las tiendas de juguetes más pequeñitas veían cómo las pequeñas Draculaura (la hija de Drácula, quizá la favorita, la más demandada), Lagoona Blue (hija del monstruo marino), Clawdeen Wolf (descendiente del Hombre Lobo), Frankie Stein (la atlética hija de Frankenstein y señora), Abbey Bominable (la fría hija del Yeti), Cleo de Nile (la pequeña descendiente de la momia, con una célebre hermana mayor, Nefera de Nile) y Ghoulia Yelps (hija de zombies) desaparecían de las estanterías y de las manos de los reponedores. Llegaban veinte, treinta por día. Entre las escasas opciones para encontrarlas estaban las subastas de eBay, las compras en países extranjeros o las tiendas de algunos aeropuertos. Poco más. Su demanda sobrepasó a toda la cadena: productores, distribuidores y a los propios Reyes Magos.
Desde la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ, que evita nombrar marcas o productos en particular al representar a todos los fabricantes y marcas de España), creen que, como los bebés, los coches o los camiones de bomberos, las muñecas son fundamentales entre los juguetes que escogen los niños. "El juguete evoluciona porque imita a la realidad, solo que cambia poco a poco: las cocinitas de hoy ya no llevan fogones de gas, sino vitrocerámicas. Pero siguen existiendo, porque seguimos cocinando", explica la Secretaria Técnica de la EAFJ, Cristina Miró. "Los niños quieren más o menos lo mismo siempre, solo que varía según avanza la sociedad. Ahora los juguetes se conectan a internet de forma inalámbrica, por ejemplo. Pero lo más importante es que razonemos entre padres e hijos la carta a los Reyes, que nos sirva para conocer a nuestros hijos y saber lo que les gusta", explica por teléfono desde Ibi, en pleno Valle del Juguete alicantino.
¿VUELTA A LOS JUGUETES TRADICIONALES?
En los grandes almacenes El Corte Inglés observan que, desde hace unos años, "se está apreciando una tendencia cada vez mayor a la vuelta a los juguetes tradicionales", desde Playmobil o Barbies a construcciones o radiocontrol. Y, de nuevo, las Monster High vuelven a ser una de sus estrellas de la Navidad, al igual que los muñecos Monsuno o los Skylanders, relacionados con un videojuego, o como Pocoyo para los más pequeños.
"La tendencia se mantiene: si tú te lo pasaste bien con los Lego, Playmobil, Barbie, Scalextric… quieres que tus hijos tengan la misma experiencia", relata Messeguer, que también tiene una teoría acerca del hecho de que las hijas de los monstruos se hayan vendido tan bien a lo largo del año y vayan a hacerlo estas navidades: "Las Barbies, por ejemplo, siguen estando muy presentes. Y si los niños piden una Barbie y también una Monster High, el año pasado la Barbie la tenían seguro. Pero la Monster High era más difícil y los padres se decían '¿Cómo una supermamá como yo no va a conseguir que los Reyes le traigan una Monster High?' Y si no llegaba, la regalaban más tarde, quizá por el cumpleaños. Por eso se ha mantenido a lo largo del año".
¿Y los chicos? ¿Qué pasa con ellos? "También les gustan las Monster High, y también hay figuras de chicos, como Deuce Gorgon (el hijo de Medusa) y Clawd Wold (hijo del Hombre Lobo y hermano mayor de una de las Monster), y cada vez se animan más. Muchos vinieron a la fiesta de Halloween que organizamos en Barcelona, eran prácticamente mitad chicos y mitad chicas", explican los responsables de Mattel España, que creen, a falta de acabar el periodo navideño, que esta temporada su éxito se repetirá. Este año, con más previsión y pasado el shock de 2011, han salido a la venta una nueva gama de muñecas, las llamadas Scaris, y más productos (desde ropa, mochilas o estuches a la recién llegada tableta de las hijas de los monstruos donde consultar su propia versión de la wikipedia) y que la tendencia continuará en 2013. Así que sí: habrá Monster High, para todos y por mucho tiempo.
Pero, ¿y la crisis? ¿Se nota en el sector, que en 2011 logró 1.300 millones de ventas nacionales? "Claro que se nota", explica Miró, de la AEFJ. "La previsión que estimamos es de una caída de un 10%. El año pasado fue más suave, en torno al 4%, habíamos aguantado, pero este año… Esperamos subsistir, somos los aliados de los Reyes Magos", explica. Parte de la salvación es este período, ya que el 75% de las compras de juguetes se llevan a cabo en las últimas seis semanas del año, y también la exportación, que roza el 40% y en 2011 aumentó un 8%.
"La gente sigue gastando mucho dinero en juguetes", asegura Victoria Messeguer, "y los artículos más caros se siguen vendiendo y agotando. Pero la gente hace una compra más responsable, ya no se llevan muchas cosas con el pensamiento de 'Ya lo devolveremos'. Papá Noel y los Reyes Magos tienen que venir, te lo quitas del cava, del turrón, de dónde sea. Aunque sea haciendo el último esfuerzo, entre todas las casas, contando con abuelos, tíos… Además, hay cosas que no apetece explicarle a un niño".