25-S rodea el Congreso: Siete claves de la marcha
1. ¿POR QUÉ PROTESTAN?
- Contra el secuestro de la democracia y la soberanía:Según su manifiesto, los convocantes del 25-S llaman a rodear el Congreso con el fin de "rescatar la democracia y la soberanía", secuestrada "por la Troika y los mercados financieros" con el "consentimiento y la colaboración de la mayoría de los partidos políticos".
- Contra las instituciones: A juicio de los manifestantes, "se mueven por intereses que no son los de la mayoría". "No tenemos nada que hablar con un poder que ha demostrado sistemáticamente ser ciego, sordo y mudo a justas y concretas demandas de igualdad y justicia social", asegura el comunicado.
- Contra imposiciones y recortes: "Desobedeceremos sus imposiciones injustas, como la de pagar su deuda", asegura el manifiesto, donde se defienden "los derechos colectivos", es decir, "la vivienda, la educación, la salud, el empleo, la participación democrática y la renta".
2. ¿QUÉ PIDEN?
- Dimisión del Gobierno y proceso constituyente: Exigen "la dimisión de este Gobierno como primer paso" para, después, iniciar "un proceso constituyente" que sea de "participación directa" y "abierto" en el que se desarrolle un sistema que garantice que "las decisiones colectivas sean completamente efectivas".
- Castigo a los responsables de la crisis: "Iniciar un proceso que permita que los responsables de la crisis dejen de ser impunes, para que los pirómanos que han provocado nuestra crisis no sean recompensados y empiecen, en cambio, a ser juzgados".
- Una salida colectiva de la crisis: Pese a que muchos, como la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, han querido ligar esta convocatoria con grupos de extrema derecha, el manifiesto rechaza explícitamente el fascismo en uno de sus párrafos: "Significa negarnos a aceptar el miedo, la impotencia y la desorientación surgidas de la reducción de lo político a lo económico y sus consecuencias fascistas, xenófobas, racistas y machistas".
3. ¿CÓMO SURGIÓ EL 25-S?
La plataforma En Pie, la convocante de la protesta, surgió entre abril y mayo de este año de entre varios grupos de indignados, la mayoría de ellos (cinco de sus siete miembros) del colectivo Democracia Real Ya. El grupo planteaba la necesidad de una protesta "más contundente". Así lo transmitieron los miembros de la plataforma a los distintos grupos del 15-M en una asamblea que se celebró el pasado 5 de agosto en Madrid para recabar apoyos. En dicha reunión, los miembros de En Pie manifestaron que el objetivo máximo de la acción era "sin más, la disolución de las Cortes, el Congreso y del Gobierno", informa Pol Pareja.
Desde entonces han existido dos puntos de inflexión en esta convocatoria. El primero fue la reunión del 5 de agosto, de la que muchos salieron decepcionados por cómo se explicaron los motivos de la protesta. Las connotaciones golpistas que puede tener el nombre de la movilización (en un principio se llamaba Rodea y toma el Congreso), el ¿después qué?, la ambigüedad de algunos tramos del manifiesto y la concurrencia de la convocatoria con otras protestas en el mes de septiembre, coparon las dudas de los presentes. Finalizado el encuentro y reunidas las correspondientes asambleas en cada barrio, algunas decidieron apoyar la acción y otras desmarcarse.
El segundo fue la reunión celebrada el fin de semana del 25 y 26 de agosto. Los convocantes sabían que una movilización de este tipo necesita un apoyo masivo para tener sentido. El hecho de que un gran número de asambleas de indignados se hubieran desmarcado jugaba en su contra. El 15-M, por su parte, no ignoraba la fuerza de la convocatoria -más de 40.000 personas han confirmado su asistencia en Facebook- y no quería quedarse fuera. Unos y otros se dieron una segunda oportunidad.
Tras horas de debate, se decidió aunar pretensiones y dar un giro a la convocatoria. Se sutituyó el manifiesto inicial por uno más modesto, corto y menos populista. Sin embargo, este cambio no logró que muchas asambleas que rechazaron su apoyo se adhieran a la convocatoria.
Aún así, la lista de grupos que apoyan el 25-S es larga.
4. RECORRIDO
La protesta comenzará oficialmente a las 18:00 horas, momento en el que se formará "un cinturón triangular entre las plazas de Sol, Neptuno y Cibeles", según la convocatoria. Sin embargo, los actos comenzarán mucho antes.
Este es el horario oficial publicado por la Coordinadora 25-S:
Junto al recorrido, la Coordinadora asegura que "caben todas las acciones no violentas y reivindicativas" que los manifestantes quieran hacer.
5. ACCIONES
Durante la manifestación se realizarán varias acciones de las que hay que destacar tres. Una de ellas será la llamada "mutación en Ecce Homo", por la que se invita a los manifestantes a imprimir y recortar una imagen del famoso Cristo de Borja 'restaurado' por Cecilia Giménez, para llevarla a modo de careta ante el Congreso.
Otra será el Discongreso, una acción por la que se pretende mostrar que "la democracia española es un disco rayado" en el que "la cara A y la cara B son la misma". Por eso, animan a "cambiar el disco" a través de cinco sencillos pasos:
Pero la más importante de las tres acciones será el intento de entrega de la Petición Democracia 4.0 en el Registro del Congreso de los Diputados. Un documento en el que se pide más participación ciudadana en la toma de decisiones legislativas. Para ayudar a su entrega, han elaborado una guía. Sin embargo, el Ministerio del Interior ha decidido impedir la entrada en el Registro.
6. ASPECTOS LEGALES
Lo que más preocupa a quienes mantienen dudas sobre esta convocatoria es su carácter legal y tener una respuesta clara a si supone un delito rodear el Congreso.
La Comisión Legal de Sol ha lanzado un comunicado explicando los aspectos legales del 25-S con la intención, según aseguran, de "informar a las asambleas, desde un punto de vista estrictamente técnico-jurídico, sobre lo que el Código Penal dice acerca de los aspectos concretos que pueden afectar a dicha convocatoria" y no con la idea de "fomentar la desmovilización" ni "entrar a valorar la oportunidad o la dinámica del proceso que ha llevado a la convocatoria".
Según el texto, "tal y como se plantea la convocatoria" se podrían cometer delitos contra las instituciones del Estado recogidos en varios artículos del Capítulo III del Título XXI del Código Penal.
Artículo 494
El primero de los artículos es el 494, que sanciona con pena de prisión de 6 meses a 1 año, o multa de 12 a 24 meses, a quienes "promuevan, dirijan o presidan manifestaciones u otra clase de reuniones ante las sedes del Congreso de los Diputados, del Senado o de una Asamblea Legislativa de Comunidad Autónoma, cuando estén reunidos, alterando su normal funcionamiento".
Según la Comisión Legal de Sol, "este es uno de los artículos que refleja más fielmente la protesta" porque es una manifestación ante el Congreso y porque el 25 de septiembre estarán reunidas las Cortes. Sin embargo, señalan que para que exista delito, "la manifestación debe alterar el normal funcionamiento de las Cortes" y que "se castiga únicamente a quienes promuevan, dirijan o presidan dichos actos", no estando incluidos "los ciudadanos que simplemente acudan y participen en dicha convocatoria pacíficamente". Explican, además, que para que se produzca delito se han de dar de forma simultánea "las cuatro circunstancias" anteriores "y no sólo las dos primeras". Es decir, no habría delito si la convocatoria transcurre de forma pacífica sin impedir el acceso de los diputados al Congreso ni perturbar el discurrir normal del Pleno.
Artículo 495
También aluden al artículo 495, que prevé penas de tres a cinco años para quienes, "sin alzarse públicamente, portando armas u otros instrumentos peligrosos, intentaren penetrar en las sedes del Congreso, del Senado o de la Asamblea Legislativa de una Comunidad Autónoma, para presentar en persona o colectivamente peticiones a los mismos". Una pena que se aplicará "en su mitad superior" a los que "promuevan, dirijan o presidan el grupo".
La Comisión Legal incide en el hecho de que presentar peticiones ante el Congreso en persona o colectivamente se puede hacer de forma pacífica sin incurrir en delito alguno, siempre y cuando no se porten "armas u otros instrumentos peligrosos".
Artículo 497
El tercer artículo del Código Penal que, según esta Comisión, puede afectar a la manifestación del 25-S es el 497, por el que incurrirán en pena de prisión de seis meses a un año quienes "perturben gravemente el orden" de las sesiones del Congreso, sin ser miembros del mismo. Una pena que se rebaja a "multa de seis a doce meses" si la perturbación no es grave.
Este es un artículo sensible para la Comisión Legal de Sol, ya que hace referencia a todo aquel que no sea miembro del Congreso, es decir, todos los manifestantes, sean o no sean convocantes. Sin embargo, destacan que el artículo se refiere a perturbar el orden de las sesiones dentro del hemiciclo, por lo que entienden "que difícilmente sería causa de perturbación del orden de las sesiones una protesta pacífica en el exterior".
Artículo 498
Por último, destacan el artículo 498, que castiga con penas de tres a cinco años de prisión para quienes "emplearen fuerza, violencia, intimidación o amenaza grave para impedir a un miembro del Congreso asistir a sus reuniones, o, por los mismos medios, coartaren la libre manifestación de sus opiniones o la emisión de su voto".
Pese a todo esto, el movimiento ya ha tenido problemas con la ley en los últimos días. El pasado 15 de septiembre, durante la manifestación convocada por la Cumbre Social por las calles del centro de Madrid, varios manifestantes que portaban una pancarta del 25S fueron detenidos por la Policía.
Un día después, durante una asamblea de preparación de la marcha en el Parque del Retiro, los participantes tuvieron que identificarse ante un grupo de agentes. La Audiencia Nacional imputó a ocho de ellos.
El pasado 23, volvió a ocurrir lo mismo en el mismo lugar. Agentes de la Policía interrumpieron otra asamblea para exigir la identificación a los participantes en ella.
7. ¿QUÉ DICEN LOS PARTIDOS?
PP: La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, compara el 25S con el golpe de Estado del 23-F. "La última vez que yo recuerdo que se rodeaba y se tomaba el Congreso fue con ocasión del intento de golpe de Estado", ha dicho este lunes.
PSOE: Su secretario general ha admitido no estar de acuerdo con la protesta. Su número dos, Elena Valenciano, dice que "se puede protestar siempre que se esté dentro de la ley". "El Congreso es la representación de la soberanía popular", ha continuado Valenciano. "No existe ningún otro espacio en el que mejor esté representada la soberanía popular". Por otro lado ha criticado las palabras de Cospedal. "La comparación con el 23-F no es la más adecuada. Recuerdo a Cospedal que allí entraron unos militares con pistola".
IU: Su coordinador general, Cayo Lara, pide al Gobierno que vea "con normalidad" la manifestación y no resolverla con represión. A su juicio, "obran vallas" en los accesos al Congreso y se pregunta: "¿Qué pasa por que la gente se manifieste frente al Congreso?"
EQUO: Considera que es una "pacífica" y que "el derecho de la ciudadanía a expresar su descontento en la calle es un Derecho fundamental, también en la puerta del Congreso de los Diputados". Critica, además, la "persecución absolutamente intolerable" que existe, a su juicio, contra este movimiento.
Cristina Cifuentes (Delegada del Gobierno en Madrid): Asegura que la manifestación cuenta con el apoyo de "grupos próximos al nazismo" y advierte de que "no se va a permitir bajo ningún concepto" que "se rodee o que se tome el Congreso".