Andy Murray, su llanto, su novia y Twitter (VÍDEO)
Las lágrimas del tenista escocés Andy Murray tras perder la final de Wimbledon ante Roger Federer (4-6, 7-5, 6-3 y 6-4) recorrieron algo más que su rostro. Su imagen, cual María Magdalena al término del partido, ha recorrido las redes sociales. ¿Por pena? No, por envidia.
Mientras el pobre Murray trataba de articular un discurso coherente entre pucheros, la realización se centraba, entre otras personas, en su novia, Kim Sears, quien tampoco podía aguantar el llanto. Los usuarios de Twitter vieron entonces el cielo abierto para pedirle al tenista que dejase de llorar, ya que con dicha compañía cerca, cualquier derrota quedaba en nada:
"Con una novia como la suya, no puede estar muy triste".
"Andy Murray se va a casa con su novia. A eso le llamo yo ganar".
"Pobre Andy Murray, sólo tiene a su novia y un premio de 575.000 libras para consolarse en su gigantesca casa esta noche".
Tras el partido, Murray reconoció que la derrota ante Federer, nuevo número uno del mundo de la ATP, fue especialmente "dura" por la "atmósfera increíble" que se creó en la pista central y por haber tenido lugar ante toda su familia. "Hoy ha sido una derrota bastante dura porque juegas delante de un público que crea un ambiente increíble, uno de los mejores en los que he jugado. Mi familia también ha venido a verme, así que sí, ha sido duro", reconoció el británico.
"Ha sido el mejor partido que he jugado en una final de 'Grand Slam'. No he cometido errores tontos ni he regalado juegos. He tomado buenas decisiones durante la mayor parte del tiempo y me alegro por ello. Me he sentido más cómodo antes y después del encuentro que en otras finales de 'Grand Slam'', señaló.
Murray le vio otra parte positiva al margen de su novia: ser el primer británico en luchar por el título 74 años después de que lo hiciera Bunny Austin en 1938.