"Soy una monja tuitera, versión 2.0"
Xiskya podría ser el nombre de una usuaria más de las redes sociales, con su página web, su Facebook, su Linkedln y Google+. Hasta aquí nada llama demasiado la atención si no fuese porque Xiskya es en realidad una religiosa de la congregación Pureza de María que ha "abrazado las nuevas tecnologías para difundir la palabra del Señor". "Evangelizo al mundo desde el 2.0", comenta entre risas en una entrevista telefónica.
Con nombre de origen azteca, esta nicaragüense de 42 años, nacida en León (a 85 kilómetros de Managua, la capital del país), decidió no dedicarse en exclusiva a su hermandad, sino hacerse un hueco en las redes sociales. "Soy la monja tuitera y me encanta que me llamen así", se felicita.
Xiskya, licenciada en Filología por la Universidad de Barcelona y con un Máster en periodismo en La Universidad San Pablo (CEU), publica posts sobre lo que ocurre cada día; se atreve con cualquier tema, desde política hasta sociedad, y por supuesto religión, no siempre desde un punto de vista ortodoxo: "Hay que hablar de lo que ocurre en las calles. No contemplo un mundo desde la espiritualidad abstracta, sino desde la realidad de nuestro mundo. Desde la actualidad", puntualiza.
INCORPORADO A SU ADN
"Siempre he sido muy digital", reconoce, al tiempo que recuerda la primera vez que encendió un ordenador: "Eran de esos pesados, blancos, con la pantalla negra y las letras de color verde. Nada que ver con los de ahora", expresa esta religiosa, que no va a ningún lado sin su Macbook Pro. Xiskya sabe de redes sociales, de lenguaje HTML, SEO, número de visitas en sus cuentas oficiales, click... "Lo tengo incorporado en mi ADN, al igual que nuestro Señor", comenta.
Esta misión "de llegar a todos "no se acaba aquí", advierte. Durante la visita del Papa Benedicto XVI, el año pasado, Sor Xiskya vio la oportunidad de ampliar su "amor" por las nuevas tecnologías colaborando con el diario El Mundo. Este diario le propuso realizar su propio blog, Crónica de una Peregrina, con sus textos, fotografías, sus vídeos y tuits en directo. Dicho y hecho, cosechó éxitos y su cuenta de Twitter aumentó en número de followers.
"Fuí una monja reportera. Iba con mi pase de prensa como cualquier otro periodista porque no me bastaba ir sólo con el hábito", comenta alegremente. "Viví la visita de nuestro Padre cada minuto. Desde el lado periodístico y de la mano de los llamados JMJ, unos jóvenes extraordinarios". Durante esa semana escribió sus crónicas sobre los hechos, realizó sus propios vídeos y sus fotografías. Todo mientras tuiteaba en directo. "Me lo pase muy bien, fue una experiencia única. Puse a prueba mis conocimientos y resulta que no me ha ido tan mal", evoca.
A día de hoy la 'monja twittera', o sor Xiskya Lucía, cuenta con 3.804 seguidores en Twitter, pero reconoce que muchos la siguen por monja... y por moderna.