Unas migas de galleta terminan en el desalojo de un avión en Barcelona

Un grupo de pasajeros ha vivido un vuelo poco común en el trayecto de Barcelona a Málaga tras lo que ha ocurrido por un incidente que arrancó con los restos de galleta que se encontraron en el suelo del avión.

Según ha informado Málaga Hoy, dos pasajeros optaron por subir de nivel y aprovechar que dos asientos que eran más caros, por tener mayor espacio, estaban vacíos para sentarse en ellos.

Pero la decisión la adoptaron después de que vieran que el suelo estaba manchado de migas de galletas. Reclamaron a una de las azafatas que el avión estaba muy sucio y la trabajadora le invitó a poner una hoja de reclamación.

Lo que decidió hacer fue sentarse en el asiento que tenía un coste adicional, pese a que la tripulación le había indicado que no podían sentarse ahí si no abonaban la cantidad para poder disfrutarlo.

Después de que la cosa que se fuera un poco de las manos y que no colaboraran con los trabajadores, el comandante se vio obligado a llamar a la Guardia Civil para que les expulsaran del vuelo.

La parte positiva es que estaba en tierra y lo que acabaron haciendo fue desalojar las 10 primeras filas de la aeronave y, una vez que los protagonistas estuvieran fuera, volviesen a entrar con normalidad.

El incidente ha provocado un retraso de una hora, según ha explicado la aerolínea operadora, Vueling, a Informativos Telecinco. Ambos pasajeros serán sancionados cuando se presente la denuncia.