La multa más desconocida del metro de Madrid que afecta a este tipo de pasajeros habituales

La multa más desconocida del metro de Madrid que afecta a este tipo de pasajeros habituales

Casi nadie conoce esta norma.

Imagen de archivo del Metro de Madrid.Jan Woitas/picture alliance via Getty Images

Si hablamos del Metro de Madrid, lo estaremos haciendo de una de las infraestructuras más completas y eficientes no solo de España, sino también de Europa. Su larguísimo recorrido, así como la rapidez y buen estado de conservación de sus instalaciones, hacen de esta red de metro la envidia de decenas de ciudades europeas.

Pero para que todo esto funcione correctamente, es necesario que se cumplan una serie de requisitos y normas mínimas de 'convivencia' y uso para que esta valoradísima infraestructura no se devalúe y los usuarios puedan continuar disfrutando como hasta ahora de su servicio.

En esta ocasión les explicaremos una de las sanciones más desconocidas por parte de los usuarios del Metro de Madrid, y que, en caso de no cumplir, nos acarrearía una sanción económica -no especialmente elevada- pero a todas luces innecesaria, ya que se puede evitar de una forma sencilla.

Hablamos de aquellos usuarios que utilizan el metro -ya sea para viajar o para trasladarse de un punto a otro de la capital española- y van acompañados de su bicicleta. En este caso, un gesto tan común como es el hecho de ir agarrado o montado a tu bicicleta, podría costarte un disgusto si no conoces la normativa del Metro de Madrid.

Y es que, de acuerdo a lo establecido, y aunque sea una norma conocida por muy poca gente, hay dos formas de transportar una bicicleta en el metro -y también los patinetes eléctricos, aunque estos fueron prohibidos hace unos meses tras varios accidentes provocados por sus baterías-. 

En el caso de que vayamos acompañados de nuestra bicicleta en las instalaciones del metro, no podremos estar, bajo ningún concepto, montados en ella, de modo que, siempre que se pueda, será obligatorio llevarla plegada. 

Infiltrados
Un proyecto de Ikea

Además, otra de las obligaciones que conoce menos gente si cabe, es el hecho de que la bicicleta tendrá que ir, bien en uno de los vagones de la cabeza o en uno de los de la cola, pero siempre junto a las cabinas de conducción. En caso contrario se estaría incumpliendo la normativa y podríamos ser sancionados con una multa de hasta 30 euros.