¿Habrá 'efecto Juanma' en las capitales de provincia de Andalucía?

¿Habrá 'efecto Juanma' en las capitales de provincia de Andalucía?

El presidente popular logró hace menos de un año una insólita mayoría absoluta a base de una imagen suavizada y, también, de desgaste socialista. La derecha no aspira a repetir la jugada, pero sí a "reequilibrar" el poder local que aún tiene el PSOE.

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y el aspirante a la Alcaldía de Sevilla por el PP, José Luis Sanz, el pasado 16 de mayo en Triana.Joaquin Corchero/Europa Press via Getty Images)

El 19 de junio de 2022, Juan Manuel Moreno Bonilla logró una inédita victoria por mayoría absoluta en Andalucía, revalidando su papel como presidente de la Junta, esta vez sin muleta alguna. Nunca antes su partido, el Popular, había logrado un aval así en la comunidad. En el resultado, decían los analistas, había sido clave el llamado efecto Juanma, un tirón popular hecho de muchos retales: un tono sosegado, cierta moderación ideológica en comparación con otros líderes de su formación, una gestión sin formidables escándalos, la desaparición del miedo a que gobernase la derecha, la erosión del PSOE, la división de la izquierda andaluza... ¿Pasará lo mismo en las municipales? 

En este año corto han pasado algunas cosas. Moreno, asentado como barón popular, se ha visto dentro de algunas confrontaciones internas -sobre todo a causa de Isabel Díaz Ayuso- pero también señalado como el modelo a seguir de su jefe, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo; ha tenido su primer caso de presunta corrupción, en Marbella, y su primer proyecto escandaloso, el de los regadíos de Doñana. Sin embargo, las encuestas reflejan que apenas perdería un escaño si hoy hubiera elecciones. No le hace mella, aún. 

Los municipios son otra cosa. Bien es sabido que el componente ideológico se diluye en las distancias cortas, cuando hay que encontrar a alguien de confianza que arregle los bordillos que no dejan pasar una silla de ruedas o ponga el autobús extra que lleve al centro en menos de una hora. Son unos comicios más personalistas y en los que es esencial el conocimiento y el asentamiento en el territorio y en eso, hoy, a la espera de ver si las urnas dicen otra cosa el domingo, el PSOE le saca ventaja al PP. 

El poder local socialista más que duplica al popular, tiene un 59% de las alcaldías (459 municipios de 785 que hay en toda la región, entre ellas las de cuatro capitales: Huelva, Granada, Jaén y Sevilla) y 4.209 ediles, además de seis de las ocho diputaciones provinciales (Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén y Sevilla). El PP tiene el 27% de los regidores, en 185 municipios, con 2.486 concejales; gobierna en otras tres capitales (Almería, Córdoba y Málaga, mientras resta Cádiz, de Adelante Cádiz) y en dos diputaciones (Almería y Málaga). Son datos de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP).

A principios de este 2023, los populares andaluces lanzaron una campaña en la que daban a entender que iban a por todo, las ocho capitales y las ocho diputaciones. Reto 8+8, se llamaba. Con el paso de las semanas, han ido siendo más realistas y ahora la apuesta se condensa en una palabra: "reequilibrar". Hay que igualar la balanza con el PSOE y eso ya sería un éxito. Antonio Repullo, el secretario general del PP-A, ha defendido en sucesivas intervenciones en pre y campaña que lo importante es mantener el "empuje" de Moreno, porque eso dará buenos datos, porque hora parten con la base más sólida de cuantas ha tenido hasta ahora la derecha en unas locales. Y es que, en un despliegue "histórico", han podido presentar candidaturas en todos los municipios de la comunidad, lo nunca visto. 

¿Cómo lo han logrado? "Juanma es un valor consolidado y al alza. A la gente le gusta. Es un imán". "En los pueblos se ha perdido el miedo a encabezar una candidatura conservadora. Ahora hay un referente de que el cambio es posible y, además, la derecha no se ve como un ogro. Llegamos y sigue habiendo colegios y pensiones". "Hemos ganado en frescura. Ha llegado al partido gente nueva que antes no se nos acercaba, también independientes. Gente que pensaba que ganar al PSOE era imposible, porque era lo de siempre, se nos ha sumado", explican tres diputados autonómicos del PP consultados por El HuffPost

Los datos aportados por Repullo indican que hay 385 caras nuevas en los cabezas de cartel a las elecciones de este 28 de mayo, con una renovación total de las listas que zona el 50%, con un 30% más de presencia femenina. A llegar hasta el último pueblo ha ayudado la incorporación de 14 candidatos a alcalde que vienen de Ciudadanos -a que las encuestas dan la desaparición en numerosos consistorios y que, por ello, sólo concurrirá a un centenar corto- y de una decena de independientes. 

"Más andalucistas, más liberales, más centristas... gente que ahora sí quiere estar en nuestro barco", sentencia un parlamentario. En las conversaciones se alternan el entusiasmo y la cautela. "Vamos a no venirnos tan arriba", resume una popular con 20 años de experiencia a sus espaldas, que ha visto de todo, de Teófila Martínez a hoy. "Las sensaciones son buenas, aunque ya sabemos que unas municipales son una cosa muy diferente", apostilla. 

Frente a ellos, una izquierda que da señales de cierta recuperación, tras un lustro negro de divisiones, confusiones y desilusiones. Empezando por el PSOE, que tiene ya a Juan Espadas consolidado en el regional y ha podido elegir a su gente y sus líneas de trabajo. "Ellos dicen que se nos mueren los votantes felipistas y estamos acabados. Desprecian así el trabajo socialista de tantos años. La Junta, en los peores años, la levantó el PSOE. Y los pueblos, tan olvidados hoy desde San Telmo (el palacio donde Moreno tiene su despacho de presidente), aguantan con alcaldes socialistas", defiende una edil socialista sevillana. 

El sentir general es que, sí, ha habido "marejadilla", "problemas", "bajada", "baches", pero que tocado fondo, sólo queda "subir", "remontar", "volver por nuestros fueros", repiten dos diputados autonómicos. Recuerdan que más de un 15% del voto que tuvo el PP-A en las últimas autonómicas, que le ayudó a consolidarse, fue cedido por antiguos votantes socialistas, cansados o desencantados. Es una horquilla "móvil", que están convencidos de atraer de nuevo este domingo. "Lo importante, lo esencial, es que la gente de izquierdas vaya a votar, que nadie se quede en casa", zanjan los socialistas. 

El PP juega también en Andalucía a su estrategia antisanchista. Ha trasladado a la campaña la idea de que, votando por un alcalde del PSOE, se está avalando al presidente en La Moncloa. Moreno insiste: una papeleta del PSOE es un aval al Gobierno de coalición nacional, una decisión que va más allá de un pueblo y escala Despeñaperros. "Los electores no son tontos. Saben que Sánchez es un valor y no un lastre. Este Gobierno progresista ha conseguido pasos históricos. El PP se equivoca, eso del sanchismo que han acuñado desde la rabia suena a totalitarismo y a la gente no se la cuelan, porque no es así. Los sanchistas no se ocultan y son cada vez más. No hay más que ver a los jóvenes", dice un entusiasta socialista onubense. 

Las ocho joyas de la corona

Además de poner la balanza igualada, el PP quiere ir a por la joya de la corona: las capitales de provincia, de las que ahora controla tres. En las que ya tiene, conservará a los candidatos. En las que no, ha hecho renovación, en algunos casos con pesos pesados, personas de confianza de Moreno, que han estado en su gobierno y que son fieles a su filosofía y lo reivindican como la mejor carta de presentación. 

Los sondeos les dan continuidad en Málaga, Almería y Córdoba, solos o coaligados con Vox, y serían primera fuerza en todas las demás, con un puñado de votos por decidir si es una suma de derechas o de izquierdas la que se acaba quedando la alcaldía. El tiempo de las mayorías absolutas se acabó. Se salvará, quizá, Málaga, que la roza. 

La mayor pelea se juega en Sevilla, porque hoy es la mayor capital gobernada por el PSOE. El actual regidor es Antonio Muñoz, que sucedió en el cargo al hoy líder del PSOE andaluz, Espadas, cuando compatibilizar los dos cargos ya no fue posible. Tomó el bastón de mando en enero de 2022 y desde entonces ha ganado en popularidad y conocimiento. Ha contado con el apoyo entusiasta del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ha ido a arroparlo en campaña, sabedor no sólo de la importancia de una ciudad de 690.000 habitantes, sino de lo que supone en una provincia clave, dentro de una región clave, de cara a las elecciones generales de diciembre. 6,5 millones de votantes, 61 diputados del Congreso están en juego. La sevillana, la andaluza, no es sólo una pelea puntual, localizada, sino que es la antesala de la batalla por La Moncloa. Por eso Feijóo también se ha dado un paseo por la capital del sur, reclamando el voto de los desencantados del socialismo.

Muñoz tiene enfrente a José Luis Sanz, que ha hecho de su seriedad su reclamo. Arrastra el sambenito de haber sido alcalde de Tomares, un pueblo del cercano Aljarafe sevillano, un foráneo. Fue durante años uno de los hombres más poderosos dentro del PP andaluz, mano derecha de Juan Ignacio Zoido, pero la dirección del partido en la madrileña calle Génova le frustró el ascenso al apostar por Juanma Moreno. Los antiguos rivales no han sido los mejores cuates pero se respetan y, en público, se muestran unidos. Los suyos dicen que se llevan mucho mejor de lo que dicen las "malas lenguas". 

Los sondeos dan un escenario de verdadera foto finish: el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sostiene que Muñoz se podría mantener, con 14 o 15 ediles (la mayoría absoluta está en 16), sumados a os tres que lograría Con Andalucía (la unión de IU, Podemos, Verdes y Equo). El PP tendría entre 12 y 13 concejales y Vox, dos o tres. También esa suma podría llegar a superar el 50% necesario. Otros sondeos como el de la Fundación Centra (el llamado CIS andaluz) o Sigma 2 sitúan ligeramente por delante al PP, con 13 o 14 ediles, por 12-13 del PSOE. Misma situación, pero dada la vuelta. También son posibles las mismas sumas, por la ultraderecha y por la izquierda unida. 

Las cosas están ajustadas, en realidad, en toda la comunidad. La pelea es dura. En Granada, por ejemplo, el actual alcalde es Francisco (Paco) Cuenca, en el cargo desde apenas 2021, cuando ascendió con el apoyo de Adelante Granada y Ciudadanos ante la dimisión de su predecesor, Luis Salvador (Cs). Su contrincante es Marifrán Carazo, un peso pesado, exconsejera de Fomento de Moreno, lo que evidencia que el PP apuesta fuerte. Las encuestas, del Centra a Gad 3, dan una victoria popular con entre 12 y 14 ediles, mientras el PSOE se quedaría con 9 o 10. Las alianzas son posibles con Adelante Granada (entre uno y tres) y Vox (de uno a cuatro). 

Pero Cuenca ha revolucionado el escenario estos días  prometiendo que dejará gobernar a la lista más votada, algo que suele defender Génova y no Ferraz. Dice que es un compromiso "firme y claro", que el resultado del domingo vendrá a poner a prueba. 

En el caso de Huelva, el PSOE parte de una mayoría absoluta con Gabriel Cruz que ahora no está tan clara. La popular Pilar Miranda, expresidenta del Puerto de la ciudad, quiere su puesto. En este caso, sondeos como los del Centra y Dataestudios indican que podría haber vuelco, con 13 o 14 ediles para el PP y entre ocho y 11 para el PSOE, aunque los socialistas se revuelven ante estos datos e insisten en que Cruz "es un alcalde querido" y logrará un mejor resultado. Vox lograría dos representantes, y el resto de dividen entre Adelante Huelva y la Mesa de la Ría, puede que uno para cada uno. 

Cádiz es la pelea que se sale del bipartidismo, ese que gobierna ocho de cada diez municipios andaluces. La batalla, en la trimilenaria ciudad, es a tres bandas. Tras los dos mandatos del cambio de José María González, Kichi, le toma el relevo en la candidatura David de la Cruz, a quien los sondeos (Centra, Dataestudios) dan entre ocho y nueve ediles, segunda fuerza. La primera sería el PP, con Bruno García al frente, con entre 12 y 14 concejales. Justo en 14 está la absoluta. Importante el margen porque Vox lograría un puesto o nunguno. El PSOE, representado por Óscar Torres, se quedaría con entre cinco y seis ediles, pero la suma con la izquierda pude mantener el gobierno progresista. 

En Jaén el alcalde es el socialista Julio Millán, que aspira a su segundo mandato y se enfrenta al popular Agustín González. Otra cara nueva popular. El CIS andaluz, de nuevo, arroja una situación de práctico empate técnico: 13 ediles para el PP, 12 para el PSOE y posiblemente dos para Vox. Aquí el problema para los socialistas es que no habría más fuerzas con representación, esto es, no hay suma posible desde la izquierda.  

Almería es cosa de mujeres. Único duelo femenino en las capitales andaluzas. Por el PP, tratará de mantener el cargo la regidora, María del Mar Vázquez. Tampoco ella fue la cabeza de lista en 2019, pero los cambios en el Gobierno de la Junta, cuando el anterior alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, se convirtió en consejero de Medio Ambiente en julio del año pasado, la ascendieron. Ahora quiere se elegida directamente. Frente a ella, la socialista Adriana Valverde, actual portavoz de su fuerza en el municipio. En esta ocasión, el Centra y el sondeo de prensa de Celeste Tel dan resultados dispares: 14 a 15 escaños para el PP (sobre 27, tendría la absoluta), dice el primero, 13 dice el segundo; entre ocho y nueve para el PSOE, coinciden; dos para Vox y uno o dos para Podemos, completa el primero; tres para Vox y uno para Cs, dice el segundo. Las sumas varían, pero a priori todas son favorables a los conservadores. 

Córdoba, por su parte, está hoy en manos del PP, con José María Bellido como regidor desde 2019. Quien aspira a nuevo alcalde es el socialista Antonio Hurtado, que viene de ser diputado en Madrid. En este caso, los populares tienen buenos datos a su favor: el Centra le augura una mayoría absoluta, con entre 15 y 16 ediles, mejorando sus datos. Sin embargo, otro estudio de la Universidad de Córdoba dice que no serán más de 12 o 13. El PSOE se estabiliza en siete a nueve en ambos casos. Con la proyección de voto de los expertos universitarios la clave estará en el edil número 15 que se logre vía coaliciones, porque otorga dos o tres a Vox y siete a Hacemos Córdoba (IU, Podemos, Más País, Verdes Equo, Alianza Verde e Iniciativa). El organismo de estudios de la Junta deja los ediles de la ultraderecha en dos y los de la izquierda, en no más de tres. 

Y en Málaga la duda no es quién ganará, sino por cuánto. Francisco de la Torre, regidor desde 2000, sigue siendo uno de los mayores baluartes del PP nacional y, pese a que hace meses expresó su intención de retirarse, al final aceptó la petición de presentarse de nuevo, a sus casi 81 años. Los sondeos (Centra, Gad 3) le otorgan una práctica mayoría absoluta con 16 o 17 ediles sobre un total de 31. El PSOE, representado por Daniel (Dani) Pérez, se mueve entre los 10 y los 12 concejales, mientras que Adelante Málaga lograría dos o tres y Vox, ninguno o hasta dos. 

La pelea de las diputaciones dependerá del número de alcaldes que se coseche en cada provincia y el reparto podría parecerse al actual, en la mañana del 29 de mayo. Un bocado interesante de inversiones muy cercanas, muy necesarias, pero también de enorme responsabilidad, por lo mismo. 

Las respuestas, este domingo, en cada papeleta de los andaluces.