Este conductor iba tranquilamente por la carretera cuando vio parado en el arcén un coche y a una persona al lado. Para saber si necesitaba ayuda le hizo una señal desde el coche, a la cual respondió rápidamente para acercarse a socorrerle. En seguida le realizó la maniobra de Heimlich cuando vio que lo que le pasaba era que se estaba ahogando. Su rápida actuación acabó salvando la vida de esa persona.