¿Y por qué no enfermería?

Llega ese momento tan esperado en el que has aprobado y conseguido la nota para acceder a la universidad y eliges ...enfermería. Tu sueño, tu vocación y tú ilusión se topan con la pregunta de siempre: ¿por qué enfermería si te llega para medicina? O con: ¿haces enfermería porque no te llegó para medicina?

Y tú, ¿qué contestas? Te voy a ayudar...

Pensar que la enfermera es la ayudante, auxiliar o subordinada del médico es faltar a la verdad. Por cierto, hablaré de la "enfermera" porque es así, e incluye a hombres y mujeres, al igual que "médico" incluye a hombres y mujeres.

Tanto la enfermera como el médico forman un equipo en el cual están incluidos más profesionales. Pero nos centraremos en la pareja médico-enfermera.

Como bien decíamos, son un equipo, por lo que, como en cualquier buen equipo, cada uno tiene sus funciones, complementarias, ya que separadas se quedarían incompletas. Esto quiere decir que ni lo de uno es mejor ni lo del otro es peor. El médico escucha, diagnostica, opera e interviene con técnicas de mayor complejidad; la enfermera escucha, observa, valora, administra tratamientos y cuida. ¿Podría funcionar uno sin el otro? ¿Verdad que no?

Estamos hablando de médicos, pero la población siempre se dirige a ellos como doctores. ¿Sabes que hay enfermeras doctoras? A lo mejor tu enfermera del centro de salud o la que te atiende en el hospital lo es. O incluso profesora de universidad.

Más cosas. Conocemos los trabajos de investigación de los médicos. ¿Sabes que las enfermeras también investigan? Exponen en congresos, participan en guías de salud y son una parte muy importante de los avances en materia sanitaria. Tienen consulta propia en los centros de salud, desde la cual hacen una gran labor de atención a la salud de la comunidad.

Por último, te contaré que pueden gestionar, pueden acceder a la formación en gestión necesaria para dirigir tanto un centro sanitario como una unidad.

Hace 30 años que dejaron de existir los Ayudantes Técnicos Sanitarios (ATS) para pasar a ser una carrera universitaria llamada Diplomado Universitario de Enfermería (DUE), y recientemente, con el plan Bolonia, su denominación es Grado en Enfermería.

Aun así, ¿cuántas veces sigues oyendo o viendo la palabra ATS? Las mismas veces que te preguntan cuando dices que eliges enfermería. Esta es la parte que seguimos peleando y nos está costando más. Poco a poco vamos abriendo mentalidades y encontrando nuestro hueco en la sociedad. Con gente con ilusión y fuerza se conseguirá, al igual que las tan ansiadas especialidades, que siguen estancadas, como la médico-quirúrgica.

Tampoco te voy a negar que es una profesión dura en el sentido de los turnos, pero en esto te doy un consejo: no te dejes influenciar por las compañeras que todo lo ven negativo, el encanto tóxico que llamamos. No todo es negro o blanco, existe la escala de grises, y si observas alrededor, ¿qué trabajo es 100% perfecto? Ante todo, piensa que eres y trabajas en lo que quieres.

Con todo esto, volvamos al principio. Conseguiste la nota y te preguntan: "¿Y por qué enfermería? ¿No te dio la nota para medicina?". A lo que tranquilamente puedes contestar: "Sí, pero yo quiero cuidarte cuando estés enfermo, educarte en la prevención, investigar cómo poder hacerlo cada vez mejor, enseñar y aprender de mis compañeros, a la par que trabajar codo con codo con el médico para que todo salga adelante".

¡Bienvenido a enfermería!