Una recaudación de 600.000 euros por internet salva un castillo en Francia
La solidaridad de 7.400 personas rescata un edificio del siglo XIII de alto valor arquitectónico. Ahora se buscan más fondos para su reforma.
La solidaridad de 7.400 personas que recaudaron 600.000 euros a través de una campaña en internet que sigue hoy abierta ha logrado preservar el castillo de la Mothe-Chandeniers, un imponente edificio medieval próximo a la localidad de Les Trois Moutiers (suroeste de Francia).
Altruistas de 45 nacionalidades contribuyeron con 50 euros cada uno a la recuperación de este bello monumento datado del siglo XIII, en estado de abandono desde los años 80. De los 7.400 donantes, 6.500 aportaron un euro más, pasando a ser accionistas y, por tanto, copropietarios del castillo, lo que les da derecho a decidir en todo lo que concierna al edificio.
Su ya expropietario, el octogenario francés Claude-Alain Demeyer, había condicionado la compra a una retribución de 500.000 euros, una cifra alcanzada la semana pasada y ya superada en otros 100.000, que se destinarán a los gastos derivados de la operación.
La recaudación para adquirir ese inmueble de alto valor arquitectónico por sus diversos estilos tenía la Navidad como fecha tope, en virtud del acuerdo alcanzado con el propietario el pasado octubre, cuando se lanzó la campaña de donaciones.
Dado su éxito, los promotores ya han anunciado una segunda operación con la que esperan embolsar, de aquí a 2020, un millón de euros que destinarán a las obras de restauración y de seguridad y a los impuestos derivados de la compra.
La iniciativa fue puesta en marcha por la asociación "Adopte un château" (Adopta un castillo) y la plataforma digital "Dartagnans", que buscan formas de financiación participativa para la preservación del patrimonio.
Una cuestión a la que "habrá que encontrar soluciones económicamente viables", dado el elevado número de inmuebles en abandono en Francia, señaló al diario francés Le Parisien el periodista y encargado de la protección del Patrimonio en Francia, Stéphane Bern.