Por qué jamás deberías tirar el hilo dental por el retrete
El váter no es un cubo de basura.
Las cosas a la hora de ir al váter están muy claras: solo se puede tirar papel higiénico, aguas mayores y aguas menores. Pese a lo sencillo que es, aún hay muchas personas que no se atienen a esas indicaciones y, entre todos los objetos que se arrojan al váter, hay uno inesperado que causa verdaderos estragos: el hilo dental.
Aunque hay baños públicos que cuentan con carteles de advertencia para no arrojar tampones y toallitas húmedas, ninguno se hace eco de los peligros derivados de tirar hilo dental. Y, claro, las consecuencias se acaban descubriendo a las malas.
El hilo dental está hecho de nailon o de teflón, materiales no biodegradables. Precisamente porque no se degradan, pueden provocar importantes obstrucciones en las cañerías y daños medioambientales si son desechadas por el váter, según aseguran desde la empresa de fontanería Boulden Brothers.
Al recorrer las cañerías, el hilo dental puede enroscarse alrededor de mechones de pelo, papel higiénico, toallitas, tampones y heces.
"Cuando llega al sistema de desagüe, el hilo dental sigue enrollándose y acumulándose en torno a otros objetos, formando aglomeraciones que atascan o rompen la maquinaria", explica Andrea Pook, portavoz del distrito sanitario municipal de East Bay (San Francisco, EE UU).
Un portavoz del distrito de saneamiento del condado de Los Ángeles lo confirma: "El hilo dental puede acumularse sobre otros objetos, como las toallitas húmedas para bebés, y formar aglomeraciones cada vez más grandes que pueden obstruir las cañerías y desagües. A veces se enredan con las raíces de los árboles y, junto con los aceites, provocan graves problemas en los sistemas de desagüe".
"Incluso un objeto tan pequeño como el hilo dental, que no se descompone en las alcantarillas, puede provocar un problema público importante. Pueden dar pie a la fuga de aguas negras, lo que amenaza seriamente la salud pública y la calidad del agua. Una consecuencia derivada es que los organismos locales que gestionan las aguas residuales tienen que gastar más dinero en mantener el alcantarillado y las cañerías en buen estado", añade.
El Departamento de Protección Ambiental de Nueva York explica a la edición estadounidense del HuffPost que las depuradoras no están diseñadas para separar el agua y el hilo dental.
Los fontaneros y funcionarios municipales se enfrentan prácticamente a diario a monstruos de varios kilos como los siguientes, hechos básicamente de hilo dental y pura porquería:
Don't flush dental floss down the toilet #blockages#plumbing#drainagepic.twitter.com/dSGos0duiz
— N (@johnjamesjohn30) March 7, 2016
20 years of dental floss clogged in my toilet. via /r/WTF https://t.co/ydqhNczHftpic.twitter.com/D3Sk4n2IBt
— me (@not_actuallyme) September 9, 2016
A veces, el hilo dental se enrosca en las partes móviles de la maquinaria de la depuradora y puede acabar quemando los motores.
Si eres de las personas que tiran el hilo dental por el váter y estás teniendo problemas con la descarga del agua, puedes intentar arreglarlo tú mismo con alguna herramienta específica, como un desatascador de copa o un taladro de inodoro.
"No utilicen el retrete como si fuera el cubo de basura", resume Andrea Pook.
A continuación tienes una lista básica de otras cosas que nunca deberías tirar por el váter:
- Pelo
- Objetos de higiene femenina
- Arena para gatos
- Toallitas húmedas
- Pastillas
- Desatascador líquido
- Dinero (sí, hay gente que tira dinero a propósito)
- Pañales
- Aceites
- Cerillas
- Bastoncillos para los oídos
- Preservativos
Larga vida a vuestros desagües.
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.