Los colegios apuestan por la ecología
La importancia de enseñar el valor de la sostenibilidad a largo plazo.
Si queremos incentivar la concienciación medioambiental en los niños, la mentalidad de la escuela a la que acuden marca una enorme diferencia. Para los niños de la escuela de primaria de Hatfield (Reino Unido), las cuestiones relacionadas con la sostenibilidad no solo son una cuestión importante dentro de las aulas, sino que en el propio centro las ponen en práctica.
Esta nueva escuela de primaria es una de las más eco-friendly alrededor del mundo. Tiene tejados verdes de plantas y césped que proporciona aislamiento natural, pero también un lugar donde los niños pueden aprender sobre la fauna y la flora que habita ahí.
Las mesas se han fabricado con tuberías recicladas, llevan camisetas hechas con envases de yogur y utilizan retretes en los que se usa agua de lluvia reciclada. También cuentan con paneles solares y una turbina eólica que producen energía renovable, mientras que bajo el patio de juegos han instalado un sistema de transmisión de calor por intervalos conocido como IHT.
Esta última innovación es la más ingeniosa. A medida que la pista del patio se calienta con los rayos de sol, el sistema de tuberías que se encuentra por debajo se calienta al mismo tiempo. Después, el agua se distribuye y se almacena en unos depósitos termales controlados por un sistema informático que están sumamente bien aislados, por lo que el calor se disipa muy lentamente. Cuando se necesita (puede llegar a ser meses después), se utiliza. El mismo proceso se pone en marcha para recoger agua fría durante el invierno y que servirá para refrescar el edificio durante los meses de verano.
Para Howe Dell, la escuela verde del futuro ya está aquí, pero no son los únicos revolucionarios. El estudio de arquitectura 3XN tiene un ambicioso plan en mente para un colegio residencial en Estocolmo (Suecia), diseñado para ofrecer a los estudiantes una compresión cercana del estilo de vida sostenible.
También incluirá jardines verticales y agricultura vertical en el exterior del edificio, además de una parcela de vegetales en el interior. Gracias a la luz natural que pasa a través de las enormes ventanas de cristal, funciona prácticamente como un enorme invernadero. Tal y como explica el fundador de 3XN, Kim Herforth Nielsen, "es posible cambiar la concepción de la gente sobre la naturaleza y la sostenibilidad, y cómo debemos comportarnos entre nosotros a través de cómo se da forma y se diseña la arquitectura".
En Alemania, la escuela Herwig Blankertz ha convertido unos antiguos barracones militares en un entorno eficiente energéticamente. El tejado traslucido, además de dejar entrar luz natural, incorpora unos finísimos paneles solares que proporcionan energía al edificio.
También cuenta con aulas con un alto nivel de aislamiento preparado para mantenerlas más calientes o frías en función de la época del año, haciendo que se dependa menos de fuentes artificiales para regular la temperatura.
De forma similar, el instituto Marcel Sembar, en Francia, ha instalado un tejado verde no solo para integrarse en el entorno con el parque que hay en sus proximidades, sino para proporcionar aislamiento natural. Dado que es una escuela técnica, centrada en mecánica, es de esperar que el propio edificio pueda servir de inspiración a los estudiantes para adivinar nuevas formas con las que la tecnología pueda crear una relación simbiótica con el entorno natural.
Todo parece indicar que las escuelas del futuro se convertirán en lugares importantes dentro de los sistemas de las ciudades inteligentes. Esto significa que no solo comenzarán a producir más energía con opción a reciclar, sino que con una mejora en la eficiencia de almacenamiento se podría distribuir la energía sobrante a la red eléctrica local.
Quizá también podamos ver innovaciones como la que ha creado la compañía británica Pavegen. Diseñan unas baldosas especiales que dan lugar a un movimiento rotatorio gracias a un generador que transforma los pasos en electricidad cada vez que alguien pisa sobre ellas. Teniendo en cuenta lo activos que son los niños, los pasillos, el gimnasio y los patios de juegos serán lugares ideales para instalar estas baldosas.
No hace falta decir que las tecnologías digitales, como la impresión en 3D o la realidad virtual, están destinadas a utilizarse en las aulas del futuro, siendo herramientas potenciales para comprender los peligros del cambio climático. Experimentos recientes en la Universidad de Stanford han revelado que el impacto inmersivo de la realidad virtual es decisivo a la hora de hacer cambiar de hábitos a la gente en relación con el medioambiente.
¿Qué tipo de actividades puede hacer tu escuela hoy para ayudar al medioambiente? Reciclar es una práctica estandarizada, pero siempre hay más formas de ayudar a los alumnos de estar más concienciados.
El simple acto de incluir más plantas en un aula puede hacer que estén más pendientes de la naturaleza. Esto es especialmente importante en colegios de entonos urbanos, donde los niños rara vez entran en contacto con ella. Es más, la presencia de plantas se ha relacionado con la mejora de la concentración y el rendimiento de los niños en un 14%, según un estudio de la escuela de arquitectura Carnegie Mellon.
Asegurarse de que la comida que se sirve en los colegios proviene de fuentes saludables es otra forma que ha demostrado que los niños se centran más en clase y el Food For Life Partnership ha sido fundamental a la hora de cambiar la actitud al respecto.
Si todavía no estás muy seguro de la forma en la que marcar la diferencia, puedes investigar algunas ideas dentro del programa Sustainable Learning, que pone en contacto a profesores y padres con expertos locales sobre medioambiente, además de ofrecer ideas sobre múltiples campos, desde planes de estudios hasta viajes para explorar la naturaleza.
Electrify the World es una iniciativa de Nissan. Como pionera en vehículos eléctricos, Nissan cree en la necesidad de actuar ahora para un futuro más sostenible. Descubre más sobre estilos de vida inteligente y sostenibilidad.