Los clientes, atrapados en la guerra entre Bankia y los despachos de abogados
El pasado miércoles 17 de febrero, Bankia anunciaba su propuesta para que los pequeños inversores que compraron acciones en su salida a bolsa recuperasen el dinero. El 100% de lo invertido más intereses y sin tribunales. Se habilitaba un modelo de solicitud y se reintegraba el importe completo. Sin trampa ni cartón, al menos aparentemente.
Para los que se han estado quietos, todo es más fácil. Pero para aquellos inversores a los que la noticia les ha pillado con una demanda interpuesta, hay un paso adicional. Una vez restituida la inversión, tendrán que firmar un documento por el que renuncian a reclamar nada más. Y aquí es donde comienza la lucha de intereses entre Bankia y los despachos de abogados, un fuego cruzado de informaciones y advertencias con el cliente atrapado en el medio.
No hay duda de que Bankia es el causante inicial de todo el problema con el lanzamiento de una OPV de contenido engañoso, ni tampoco de que esta decisión jamás se hubiese producido sin los miles de juicios ganados por los bufetes especializados. Sin embargo, la situación para el inversor demandante ha dado una especie de vuelta perversa. Tiene que elegir entre dos simples opciones:
a) Opción Bankia: recuperar lo invertido y pagar el 'peaje' correspondiente por desistimiento al bufete, que suele estar en torno al 10% más la provisión de fondos.
b) Opción demanda: ir a por todas para recuperar el 100% real. Si gana, todas las costas las paga el banco. Eso sí, aunque con muy pocas probabilidades, se arriesgaría a perder.
Es en este apartado donde se está lidiando la batalla entre las partes interesadas. El interés de Bankia es que los clientes abandonen la vía judicial para ahorrarse la sangría en costas que supondría perder casi todos los juicios pendientes, mientras que el interés de los abogados es que los procesos continúen para conseguir operaciones más sustanciosas. Continuar con la demanda y ganar ahorrará al cliente pagar los honorarios de los abogados y gastos derivados, pero también dará mucho más dinero a sus representantes legales, ya que estos se quedan todos los intereses del dinero recuperado. Bankia devuelve el dinero con un 1% de interés bajo el pretexto de la restitución, "y no el lucro", pero los abogados están ganando porcentajes bastante más altos.
Mail remitido por un despacho de abogados a un cliente planteando las diferencia entre aceptar la oferta de Bankia o seguir con el juicio.
Fuentes de Bankia consultadas por El Huffington Post aseguran que "los despachos están mintiendo" al pedir a los clientes que no firmen el desistimiento bajo las "amenazas" de que renuncian a todo o que nadie sabe cuándo les devolverán el importe. "Hemos hecho un proceso todo lo limpio que se puede hacer. El cliente sólo firma cuando el dinero está ya en su cuenta, y esta misma semana se van a producir miles de devoluciones. En 15 días todo el mundo tiene su dinero", afirma la entidad.
El banco acusa a los abogados de querer lucrarse con los clientes y querer cobrarles las costas si desisten "porque nosotros ya las estamos pagando". Eso sí, matiza que pagarán las costas "que marque un juez, no las que ellos digan".
En el otro extremo, Arriaga y Asociados, el despacho que ha liderado el proceso judicial contra la venta de acciones del banco, cree que hay que ser muy prudente con la elección y no olvidar nunca quiénes fueron los que engañaron e hicieron perder sus ahorros a miles de personas. Fuentes del bufete consultadas por este diario aseguran que la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri está enviando a los medios "extractos parciales de documentación confidencial -habrá que ver con qué responsabilidad- con objeto de favorecer sus propios intereses y sin contar toda la verdad".
La única duda del cliente que decidió demandar no está en la validez del compromiso firmado, sino en saber si Bankia se va a hacer cargo de los porcentajes en caso de desistimiento reflejados en las cláusulas de los contratos.
Extractos del contrato con Arriaga y Asociados
Arriaga se aferra a los 7.200 casos ganados y a la sentencia favorable del Tribunal Supremo para avisar de que la única garantía es llegar hasta el final. "Bankia no ha aclarado este punto. Dice que pagará las costas, pero de sus abogados, no de los de la parte demandante".
Una pequeña inversora que prefiere no dar su nombre, cuenta su historia. Bankia le convenció para comprar 5.000 euros en acciones. Hace un año decidió acudir a Arriaga y aún no tenía fecha de juicio. Tiene miedo a arriesgarse. "Yo lo daba por perdido, así que si pierdo mil euros pues qué le vamos a hacer", explica. Arriaga le ha pedido que continúe, pero "mejor pájaro en mano". El bufete le pide el 10% reflejado en el contrato y no le devolverá la provisión de fondos, pero ella prefiere pensar que gana 4.000 euros a que pierde mil. "Tenía perdidos los 5.000", asegura.
¿Hay que tener miedo por seguir adelante? Arriaga tiene "casi la total seguridad de que todos los juicios por acciones se van a ganar", pero la decisión final, apunta, es del cliente, que tendrá que optar por una cosa u otra en función de la urgencia que tenga y de sus motivaciones. En este sentido, el despacho apunta a la restitución moral y a la victoria sobre la injusticia como plus a lo económico.
¿Existe alguna solución? La única solución real para el cliente es que Bankia aclare sin ambigüedades si pagará los honorarios de los abogados de los clientes. ¿Por qué no ha dado ese paso? Con la situación actual, en cierto modo, la entidad bancaria se ve beneficiada por el pánico que ella misma infundió al hacerles perder su dinero, por lo que los más temerosos ceden ante el por si acaso o el no vaya a ser qué. Los primeros números ofrecidos por Bankia indican que 4.700 de los 76.000 demandantes (poco más de un 6%) ya han rellenado la solicitud, pero es pronto para saber si los clientes 'presionarán' para que dé ese paso adicional. El plazo son tres meses y, diez días después, la mayoría aún consulta con sus abogados.