Los 'barcos fantasma', la nueva táctica de las mafias para el tráfico de inmigrantes
Los dos buques de carga abandonados a la deriva en los últimos días en las costas de Italia, con más de 1.200 inmigrantes ilegales a bordo, muestran que las mafias no dudan en utilizar ahora estas peligrosas tácticas para gestionar el flujo constante de migrantes a través de Mediterráneo.
Además de los medios comunes utilizados hasta ahora, como barcos de pesca o pateras, las redes de tráfico están utilizando cada vez más buques de carga con los que intentan engañar a la guardia costera que patrulla las fronteras marítimas.
Estos viejos barcos se venden en todo el mundo, "y es legal", dijo a AFP David Olsen, experto del periódico marítimo Lloyd's List. "Se venden en sitios web e incluso en eBay", señala.
Estas embarcaciones valen en muchas ocasiones menos de 200.000 euros. "Hay personas que, bebiendo una cerveza sentados en una mesa, acuerdan vender un viejo barco. Porque no les vale la pena enviar una embarcación de 40 o 50 años a India para su destrucción", dijo el experto.
La edad de dos buques de carga a la deriva esta semana en la costa de Italia, el Ezadeen y el Blue Sky M, superan los 40 años.
En ambos casos, los contrabandistas no dudaron en poner las vidas de los migrantes en riesgo al abandonar los barcos para provocar la intervención de la Guardia Costera. Es una nueva táctica para provocar una operación de rescate, como lo era hasta ahora, sobre todo en el Mar Egeo, obligar a los migrantes a desinflar las balsas y saltar al mar.
Los conflictos en Siria, Irak y Afganistán, así como la pobreza en algunos países de África y Asia, han incrementado el flujo migratorio a Europa en 2014: más de 170.000 personas fueron rescatadas por Italia en los últimos 14 meses y otros cientos, tal vez miles, murieron en su intento de cruzar el Mediterráneo.
"Sabemos que estos inmigrantes pagan entre 1.000 y 2.000 dólares por persona, lo que significa que quienes están detrás de un cargamento como el del Blue Sky M cobraron más de un millón de dólares por un solo viaje. Con eso pagan la evacuación de la tripulación y, probablemente, sobornos", explica Joel Millman, portavoz de la Organización Internacional de la Migraciones.